El préstamo del Rey a la Infanta estableció su devolución en 23 años

El pasado lunes la Agencia Tributaria envió al juez Castro el informe detallado con las cuentas bancarias de Doña Cristina que el magistrado solicitó para comprobar la implicación «real» de la hija menor del Rey en la empresa Aizóon, que comparte al 50% con Iñaki Urdangarín. En la documentación, Doña Cristina declara haber recibido un préstamo de Don Juan Carlos de 1,2 millones de euros para hacer frente a la residencia de Pedralbes, que el matrimonio adquirió por 5,8 millones de euros en Barcelona. Fuentes de la Casa Real explicaron que el ingreso se realizó con escritura, ante notario y, únicamente, a nombre de la Infanta, sin incluir a Urdangarín. Según explicó la institución monárquica, la entrega se dividió 600.000 euros; haciéndose el primer préstamo el 30 de julio de 2004 y, el segundo, el 29 de septiembre del mismo año. Ante el revuelo causado por dicho préstamo del Monarca a la Infanta Cristina, y a pesar de que Zarzuela especificara ayer que el dinero procedía de una cuenta particular del Jefe de Estado domiciliada en Madrid, «de su patrimonio personal, no de la Casa», la institución quiso sellar el debate enviando a los medios la escritura de préstamo.

En el acta notarial, fechada a 27 de diciembre de 2004, el notario Joaquín M. Rovira Perea hace constar que el Jefe de Estado, en presencia de Doña Cristina, «casada en régimen de separación de bienes», concede a su hija menor «un préstamo por 1.200.000 euros», recibido con anterioridad a la firma del acto debido a las dos transferencias mediante las que se efectuó la ayuda económica. Y se corrobora la explicación que aportó Zarzuela, especificando la adquisición de la residencia en Pedralbes como finalidad de dicho ingreso. «El préstamo debe devolverse en un plazo de 23 años», y añade que la cantidad prestada «no devengará interés alguno».

La escritura especifica que, transcurrido un periodo de carencia de tres años desde 2004, debe amortizarse el préstamo los días 23 de diciembre de cada año y se establece «para las diez primeras anualidades un importe de 50.0000» euros, ascendiendo, para las diez restantes, a un importe de 70.000 euros.

Los duques de Palma solicitaron un préstamo hipotecario de seis millones de euros, según reveló al juez Castro el notario del matrimonio, Carlos Macia. Incluso fue el propio Urdangarín quien admitió al magistrado instructor en su declaración del pasado 23 de febrero que había dejado de pagar las dos últimas cuotas trimestrales de la hipoteca de la casa de Barcelona, de la que entonces quedaban por pagar unos 3,6 millones de euros. No obstante, en su informe remitido al juez Castro, la Agencia Tributaria especificaba que la deuda contraída por la Infanta Cristina con el Jefe de Estado fue añadida en sus declaraciones por el impuesto de Patrimonio de los ejercicios 2004, 2005, 2006 y 2007. El mismo informe añade que en 2011 el tributo fue rehabilitado después de tres meses de derogación, y se presentó declaración por obligación de contribuir, como persona no residente en España, en la que no figura la deuda.