Terrorismo

ETA crea una secretaría internacional para impulsar «las negociaciones» con el Gobierno

El debate interno de la banda abierto hace más de un año se encuentra en el tramo final

La Razón
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El comité de dirección de ETA ha acordado constituir una secretaría internacional para impulsar el "frente negociador"y tratar de provocar una negociación con los Gobiernos de España y Francia.

El comité de dirección de ETA ha acordado constituir una secretaría internacional para impulsar el "frente negociador"y tratar de provocar una negociación con los Gobiernos de España y Francia, según informaron fuentes de la lucha antiterrorista a la agencia "Vasco Press".

La decisión de la cúpula etarra ha sido comunicada recientemente a los militantes de la organización terrorista dentro del proceso de debate interno iniciado en la primavera de 2012 para decidir si se confirmaba el abandono de la violencia anunciado por ETA el 20 de octubre de 2011. El debate, que dura ya más de un año, se encuentra en la fase final.

La decisión de hacer el anuncio del final del terrorismo fue tomada por la cúpula de ETA que sólo consultó con los integrantes del llamado "Zuba-hitu", una especie de consejo asesor de exdirigentes de la banda que se encuentran encarcelados y que está formado por menos de una veintena de componentes. Todos ellos habían sido miembros de la dirección de ETA antes de ser detenidos. Con el debate se pretendía que la base de la organización terrorista ratificara el abandono de la violencia.

Recientemente, el actual comité de dirección de ETA, entre la documentación utilizada para el debate, ha incluido el anuncio de la constitución de una secretaría internacional indicando que tiene como objeto impulsar el frente negociador. Las fuentes consultadas indican que la información transmitida a la militancia de la banda no precisa la composición de esta estructura, ni si estaría formada por las mismas personas que han formado la delegación de ETA en Noruega desde noviembre de 2011 hasta el pasado mes de febrero.

Desde que anunció la tregua del mes de enero de 2011, ETA ha puesto una gran esperanza en que personalidades internacionales presionen a los gobiernos de España y Francia para que accedan a entrar en una negociación con el grupo terrorista.

Estas pretensiones se han reflejado de forma expresa en el documento denominado "informe básico"que fue elaborado en marzo del pasado año para que sirviera de texto base del debate. El "informe básico"no contenía el anuncio de creación de la secretaría internacional, que ha sido una decisión tomada con posterioridad.

En ese documento, al que ha tenido acceso la agencia "VascoPress", para conseguir involucrar a España y Francia en una negociación, ETA se planteaba la necesidad de "intensificar la presión de Euskal Herria y de la comunidad internacional, hasta que a los estados les pueda producir un coste político insoportable el no entrar en el proceso".

La banda terrorista insistía en que "se debe trabajar el apoyo internacional amplio, profundizar el trabajo diplomático y trabajar bien la mediación internacional".

La insistencia de ETA en la importancia de la presencia de personalidades internacionales contrasta con el reciente desencuentro mantenido con la Comisión Internacional de Verificación encabezada por Ram Mannikalingam. Miembros del grupo de verificadores se reunieron con ETA en Noruega el pasado mes de enero y pidieron a la organización terrorista nuevos pasos hacia el desarme o el anuncio de su disolución. La negativa de la banda a asumir cualquier nuevo compromiso en ese terreno provocó que el Gobierno de Noruega expulsara a los tres representantes del grupo etarra a mediados de febrero.

Las diferencias con los verificadores quedaron de manifiesto en el comunicado difundido por ETA el 27 de marzo pasado en el que, pese a elogiar las relaciones habidas con la CIV, la banda acotaba el terreno de juego de la comisión indicado que "el tema del desarme está fuera del mandato que recibió el Comité Internacional de Verificación en su creación y, por eso, no ha estado ni está en la agenda de trabajo de ETA ni del Comité Internacional".

Los componentes de la comisión de verificación tienen previsto regresar al País Vasco este verano para analizar con las diversas fuerzas políticas con las que se reúnen si continúan su actividad o se disuelve el grupo. Esta opción ya fue considerada por los miembros del grupo en el curso de su última visita, realizada en el mes de febrero. El PNV y el Partido Socialista pidieron a los verificadores que continuaran su actividad, por lo que los integrantes de la Comisión Internacional se han tomado unos meses para reflexionar acerca de su continuidad o su disolución.