El Rey apela a una «colaboración leal y generosa»

Coincide en la cena oficial del Congreso de Móviles de Barcelona con Puigdemont, con quien se saludó cordialmente. El presidente de la Generalitat no hizo ninguna alusión política

Felipe VI inició ayer su maratoniana agenda en Barcelona en la cena de bienvenida del Mobile World Congress (MWC) 2017, ofrecida por la Barcelona Mobile World Capital y la GSMA –la entidad organizadora– en el Palau de la Música, a la que también asistió el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. A su llegada, a las 19:30 horas, Felipe VI fue recibido al bajarse del coche oficial por por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, con quien se saludó cordialmente, al igual que con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal. El Rey llegó acompañado de la vicepresidenta Sáenz de Santamaría y del delegado del Ejecutivo en Cataluña, Enric Millo.

Una vez concluidos los saludos, el Monarca entró con Colau en el vestíbulo para saludar el resto de invitados. Llamó la atención que, aunque estuviera en la lista, la presidenta del Parlamento catalán, Carmen Forcadell, no asistió. El Rey pronunció todo su mensaje en clave tecnológica y en inglés, pero al principio reservó unas frases en catalán para resaltar la «intensa cooperación y coordinación» entre el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat se Cataluña, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital y la GSMA. «Esta colaboración leal y generosa es la que mejor facilita el crecimiento económico, un mejor conocimiento e interconexión entre las personas, el progreso y el bienestar general de la sociedad». El Monarca habló así en el comienzo de un año en el que el Gobierno catalán pretende celebrar su referéndum independentista, en un marco de discretas conversaciones con el Ejecutivo central.

Por quinto año consecutivo, tuvo lugar este encuentro con representantes políticos y económicos –en la edición de 2016 se celebró en el Liceu y en 2015 en el Palacio de Pedralbes de Barcelona–. Al margen del discurso de Felipe VI, los asistentes tuvieron ocasión de escuchar a la alcaldesa de Barcelona; el director general de GSM Association, Mats Granryd; el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, y el presidente Puigdemont. Por su parte, el líder de la Generalitat –al que hubo que ponerle un escalón para no quedar inferior en altura a Don Felipe– evitó hacer ninguna alusión política, si acasó destacó que el negocio digital es de vital importancia para que «nuestra nación se posicione a nivel global», pero refiriéndose a Cataluña. Respecto a invitados del ámbito económico, asistieron altos directivos de las empresas que participan en el MWC, desde de telefonía y tecnológicas a financieras y de automoción, tanto nacionales como internacionales, y también acudirán representantes de entidades empresariales. Al fin y al cabo, pese a que el congreso comienza hoy oficialmente, varios de los principales fabricantes, como Samsung o Nokia, prefirieron presentar ayer sus novedades. El evento da el pistoletazo de salida institucional a un congreso internacional que este año prevé volver a batir sus récords, con más de 101.000 profesionales procedentes de todo el mundo y un impacto económico de 465 millones de euros.

La agenda

Congreso

Inauguración del «GSMA Mobile World Congress 2017»

Audiencias

Recibirá en el Palacio Albéniz a la Junta de Gobierno de la Real Academia de Ciencias Económicas, el Comité Ejecutivo de Fomento del Trabajo Nacional y el Comité Ejecutivo del Consorcio de la Zona Franca de Barcelona.

Cuatrecasas

Visitará la nueva sede por su centenario.