Lucha contra ETA

Fernández Díaz alega que el Estado «no está en tregua» mientras ETA no se disuelva

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha dicho hoy, al cumplirse el tercer aniversario del cese definitivo de la actividad armada de ETA, que el Estado de derecho “no está en tregua” mientras la banda terrorista no se disuelva, aunque ha asegurado que el fin de la violencia es “irreversible”.

El ministro ha firmado hoy en el Ayuntamiento de Vitoria con el alcalde de la ciudad, Javier Maroto, el protocolo de intenciones para ubicar el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo en la capital alavesa, justo el día en el que se cumplen tres años del cese de ETA.

En rueda de prensa, Fernández Díaz ha dicho que “no tiene ningún sentido” que ETA pretenda seguir existiendo dado que no va a utilizar la “vía del terror” para imponer su proyecto “totalitario y excluyente”, pero ha avisado de que el Gobierno no va a consentir que la banda terrorista pretenda “perpetuarse” como un actor político.

El ministro ha avanzado que el futuro centro memorial servirá para respetar la memoria de las víctimas del terrorismo, salvaguardar su dignidad y hacerles justicia, así como para establecer el relato de la “verdad histórica” de lo sucedido.

Según ha señalado, es “muy necesario” que las futuras generaciones conozcan la verdad de lo sucedido porque en caso contrario, ha dicho, “psicópatas, terroristas” o quienes hayan aplaudido las acciones de ETA o hayan mirado hacia otro lado querrán imponer su relato.

El ministro precisamente ha puesto el ejemplo del que ha llamado “psicópata”, el etarra Josu Zabarte, el “carnicero de Mondragón”, quien en una entrevista que publica hoy El Mundo, asegura: “Yo no he asesinado a nadie, yo he ejecutado. No me arrepiento”.

“Estoy seguro que las víctimas”, ha lamentado, habrán sentido lo que cualquier persona “normal” haya sentido cuando hayan leído la entrevista de “ese psicópata” que hace “apología del terrorismo”.

Ha incidido en que mientras ETA no se disuelva es una organización terrorista “viva” contra la que el Estado actuará como lo está haciendo desde el inicio de la legislatura.

Lo que está esperando ETA, ha dicho, es una negociación con el Gobierno para su desmantelamiento, entrega de armas, sellado de zulos.

Pero Fernández Díaz ha recordado que ya lo intentaron sin éxito en Noruega, país del que interlocutores de ETA fueron expulsados en febrero de 2013, cuando se “cansaron de esperar”, lo que puso de manifiesto que el Gobierno ni ha negociado ni piensa negociar con la banda terrorista.

Sobre el Centro de la Memoria, el ministro ha confiado en que sirva para instalar en las conciencias de los ciudadanos el firme compromiso de que algo así jamás se vuelva a producir y ha señalado que sus directrices se diseñarán en un clima de colaboración con el Gobierno Vasco.

El centro se ubicará en el edificio de la antigua sede del Banco de España propiedad del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, en desuso desde hace más de una década, que ha sido visitado por el ministro y el alcalde tras la firma del protocolo.

El ministro ha adelantado que el objetivo es que el centro comience a funcionar en 2015, aunque en un local provisional, hasta que concluyan las obras de la sede.

Mientras se producía la firma, miembros de la asociación de familiares de presos de ETA Etxerat se han concentrado frente a la sede del Ayuntamiento para protestar por la política de dispersión de sus allegados en las cárceles.

La comisión de expertos creada por el Gobierno a principios de este mes para diseñar y definir las tareas de este centro está integrada por 14 miembros.

El Centro Nacional para la Memoria de las Víctimas del Terrorismo cuenta en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2015 con casi 4 millones de euros, de los que 1.153.000 euros van destinados a la creación y funcionamiento de este organismo y casi 3 millones de euros para la rehabilitación del edificio.