La investidura de Sánchez

Iglesias traslada toda la presión a Pedro Sánchez en el último momento

“Renunciamos al ministerio de Trabajo si ustedes nos ceden las competencias para dirigir las políticas activas de empleo”

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante su intervención en el Congreso. EFE/Ballesteros
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante su intervención en el Congreso. EFE/Ballesteroslarazon

A menos de una hora de la votación, Pablo Iglesias ha trasladado toda la presión a Pedro Sánchez.

Si hace menos de una hora la investidura se daba por fracasada, ahora aún hay un atisbo de esperanza. Pablo Iglesias traslada ahora toda la presión a Pedro Sánchez y lo hace con luz y taquígrafos, sin documentos de por medio, y ante los 350 diputados del Pleno. Si Sánchez quiere ser presidente del Gobierno hoy, deberá ceder a los morados las competencias para dirigir las políticas activas de Empleo. “Renunciamos al ministerio de Trabajo si ustedes nos ceden las competencias para dirigir las políticas activas de empleo”, esta es la propuesta de última hora que ha formulado Pablo Iglesias a Pedro Sánchez.

Pedro Sánchez no contestará, pero si tendrá la oportunidad de contestar la portavoz del PSOE en el Congreso, Adriana Lastra, una vez que todos los grupos hayan intervenido, aunque desde su escaño el presidente del Gobierno ha dicho que “no” con la cabeza, mientras que la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, sonreía. “Todavía estamos a tiempo de salvar esta sesión”, ha remarcado Iglesias.

Esta ha sido también la última palabra de Iglesias en la tribuna, a escasos minutos de que pueda comenzar la votación. Comenzaba su discurso pidiendo respeto para él y su grupo parlamentario. “Le apoyamos a cambio de nada en la moción de censura. Solo por eso merecemos respeto”, ha pedido. En su intervención ha incidido en que “es muy difícil negociar en 48 horas lo que no han querido negociar en 80 días”, y ha reprochado que en el documento filtrado por La Moncloa ayer, los socialistas habían “editado” el documento morado para poner la palabra “exigencias” en vez de “propuestas”. “Una negociación de Gobierno merece al menos no ser cutres”, ha recalcado.