Política

40 años de la Constitución

José Pedro Pérez-Llorca: «La institución que mejor funciona es la monarquía»

Así lo afirma uno de los padres de la Constitución

José Pedro Pérez-Llorca, Padre de la Constitución
José Pedro Pérez-Llorca, Padre de la Constituciónlarazon

A su perfil de ponente en la Comisión que redactó la Constitución que hoy cumple 40 años, el jurista José Pedro Pérez-Llorca añade el hecho de haber ocupado la cartera de Exteriores durante dos años clave de la Transición (1980-1982) en los que nuestra incipiente democracia tuvo que hacer frente a una «tormenta perfecta» de retos con ETA en su punto álgido de capacidad asesina y el intento de golpe de Estado del 23-F. Quizá sea esta experiencia a la hora de ver a España desde fuera de nuestras propias fronteras la que le lleva a confesar a LA RAZÓN que, de todas las que se delinearon durante la Transición, «la institución que funciona mejor es la Monarquía».

En este sentido, Pérez Llorca subraya habitualmente en sus intervenciones el papel protagonista de Don Juan Carlos en aquellos decisivos años «aunque no esté de moda decirlo».

Este padre de la Constitución quiere hacer una puntualización que, en su opinión, debería presidir todas las reflexiones que se están llevando a cabo estos días en referencia a los cambios que han tenido lugar en nuestro país en los cuarenta años que van desde 1978 a 2018: «No es un parámetro lógico comparar la situación con la que había en la dictadura. Solo faltaría que no estuviéramos mejor como estamos. Los parámetros a usar han de ser distintos y más exigentes, el sistema político refleja los defectos de la sociedad española».

No sólo en las palabras que ha dirigido a este diario con motivo del aniversario sino en general en todas las reflexiones que ofrece sobre nuestro sistema político, Pérez Llorca acostumbra a llamar la atención sobre las graves consecuencias que un exagerado proceso de descentralización está teniendo en la convivencia cívica en nuestro país. En este sentido, para este «padre» de la Constitución «es obvio que habría que parar el proceso que no está siendo de descentralización sino de deconstrucción total del Estado».

En un esfuerzo por reconducir el debate en todo lo relacionado a nuestra Carta Magna, Pérez Llorca recuerda que «las Constituciones no consiguen cosas ni dan trigo, sino que se limitan a proporcionar un marco de convivencia» para una nación. Y, haciendo gala de un raro y encomiable espíritu de autocrítica en el llamado «bando constitucionalista», reconoce: «El marco proporcionado en este caso no ha sido, en general, correcta ni constructivamente utilizado».

En cualquier caso, Pérez-Llorca es optimista. En un reciente acto conmemorativo de la Constitución organizado por la Asociación de Jueces Francisco de Vitoria, el ponente se mostró partidario de una prudente reforma de nuestra Carta Magna porque es una reivindicación que percibe en nuestra sociedad pero cree que, aunque existen elementos perturbadores en nuestro panorama político, «saldremos bien de esa reforma».