Armada

La Audiencia exculpa a la Armada del incidente con Greenpeace

Afirma que la actuación de los militares «estaba amparada por la legalidad» pese a que una activista resultó herida

La Audiencia exculpa a la Armada del incidente con Greenpeace
La Audiencia exculpa a la Armada del incidente con Greenpeacelarazon

Afirma que la actuación de los militares «estaba amparada por la legalidad» pese a que una activista resultó herida

“La conducta de los activistas de Greenpeace fue totalmente antijurídica”, “la actuación de la Armada estaba amparada por la legalidad” y “estaban desarrollando una función de seguridad y orden público”. Éstas son algunas de las conclusiones con las que la Audiencia Nacional ha tomado la decisión de archivar la investigación que se abrió tras los incidentes protagonizados el 15 de noviembre de 2014 entre militares de la Armada y miembros de la organización ecologista, cuya “protesta pacífica contra las prospecciones petrolíferas” en Canarias acabó con una activista lesionada en el agua tras impactar su lancha contra la de los uniformados. Todo, durante el intento de abordaje del barco Rowan Renaissance de Repsol. De esta forma, la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia confirma el auto del Juzgado Central de Instrucción nº5, que en febrero optó por sobreseer la causa tras las denuncias de Greenpeace y deja claro que ya no cabe posibilidad de recurso alguno.

Tal y como se desprende de la sentencia, el citado día, desde el barco ecologista se arriaron tres lanchas, cuyos pilotos “no atendieron los requerimientos del buque Relámpago de la Armada”. “Por el contrario -continúa- se dirigieron velozmente a aproximarse al Rowan Renaissance para abordarlo”, por lo que dos lanchas militares salieron a su encuentro para “tratar de bloquearlas”. Tras una persecución, se ordenó a las embarcaciones militares “que impidieran el abordaje empleando la fuerza mínima imprescindible”, tal y como marcan las reglas de enfrentamiento. En ese momento, fue cuando una de ellas colisionó con la de los activistas, cayendo al mar la italiana Matilde Brunetti.

Pese a las lesiones, las reclamaciones de Greenpeace y las numerosas imágenes y vídeos con los que buscaban atacar a la Armada, el Tribunal “comparte plenamente” los motivos del juez instructor para sobreseer la causa porquelos activistas se adentraron de manera consciente y voluntaria en una zona de exclusión marítima” y “persistieron en su actitud negándose hasta en nueve ocasiones a abandonar dicha zona”. Además, recuerda que “lejos de desistir en su empeño”, arriaron tres lanchas para abordar el barco de Repsol y las “lanchas de la Armada agotaron todas las posibilidades de conseguir cumplir la misión encomendada”. De hecho, hace hincapié en que la actuación de los dos pilotos no fue “de inmediato”, sino que “seguían las órdenes de sus mandos” y su “actuación estaba amparada por la legalidad”. “Se les indicó que impidieran el abordaje inminente empleando fuerza no letal; ordenaron a los activistas que se marcharan; realizaron maniobras disuasorias para evitar que se acercaran al barco y, por el contrario, los activistas se aprestaban a abordarlo”, explica el auto, que añade que los dos pilotos “solicitaron órdenes y aplicaron las que recibieron, interceptando físicamente la maniobra de las lanchas de Greenpeace”.

Por todo ello, el tribunal desestima el recurso de apelación de la organización ecologista y confirma la decisión del Juzgado Central de Instrucción nº5 “en su integridad”.