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La Guardia Civil requisa 100 urnas y 2,5 millones de papeletas en Igualada

El alcalde de la localidad, del PDeCAT, ha dicho que las urnas son para otro fin.

Papeletas incautadas por a Guardia Civil el pasado 20 de septiembre
Papeletas incautadas por a Guardia Civil el pasado 20 de septiembrelarazon

Los responsables del almacén han dicho que las urnas iban a ser utilizadas para la finalmente fallida moción de censura contra la actual directiva del FC Barcelona, impulsada por el exaspirante a la presidencia Agustí Benedito.

La Guardia Civil ha incautado en un almacén de Igualada (Barcelona) 2.500.000 papeletas, 4.000.000 de sobres y 100 urnas para el referéndum del 1 de octubre suspendido por el Tribunal Constitucional, según han informado a Efe fuentes policiales.

Los responsables del almacén han indicado a los agentes, han explicado las fuentes, que las urnas iban a ser utilizadas para la finalmente fallida moción de censura contra la actual directiva del FC Barcelona, impulsada por el exaspirante a la presidencia Agustí Benedito.

Del hallazgo de las urnas se ha dado cuenta a la Fiscalía, pero, según la misma fuente, han quedado depositadas en el mismo almacén, en un altillo de difícil acceso.

En el lugar ha comparecido el alcalde de Igualada, Marc Castells, del PDeCAT, que en su cuenta de Twitter ha escrito que ha acompañado a las empresas registradas hoy en el municipio para darles apoyo y asegurarse de que el registro fuese “estrictamente legal”.

También ha negado a través de esta red social que se hayan requisado urnas en la operación.

Esta es la segunda gran incautación de material electoral que ha llevado a cabo la Guardia Civil, que el pasado 20 de septiembre requisó casi 10 millones de papeletas para votar en el referéndum en el registro de una nave industrial del municipio barcelonés de Bigues i Riells ordenado por el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona.

Además de las papeletas impresas con el “sí” y el “no”, los agentes intervinieron entonces numeroso material electoral para el 1-O.

Esa nave era propiedad de Pau Furriol Fornells, que fue detenido el mismo día por la Guardia Civil junto a otra mujer vinculada a esa empresa.