Francia

La policía gala detalla un secuestro de ETA en el juicio en París

Una oficial de la Subdirección Antiterrorista francesa (SDAT) dio detalles hoy del secuestro por ETA de una familia guipuzcoana en las Landas francesas en agosto de 2007 para robarles una furgoneta para fabricar un coche bomba, que estuvo "minuciosamente preparado".

La operación "implicaba a un gran número de miembros del aparato militar"y sirvió para planificar un atentado "de gran magnitud"-finalmente fallido- en Oropesa del Mar, teniendo en cuenta la carga explosiva de unos 500 kilos de amonal, indicó la comandante Claire Carimantran, ante el Tribunal de lo Criminal de París.

Carimantran explicó en detalle ante este tribunal que juzga a diez presuntos etarras el secuestro, entre el 24 y el 27 de agosto de 2007, de la familia de la localidad guipuzcoana de Orio formada por Miguel Igoa, Maria Cristina Campos Sánchez y el hijo de ambos, Oier, que tenía cuatro años cuando ocurrieron los hechos.

Un comando de ETA, que inicialmente se presentó como agentes de policía, irrumpieron en la caravana de esta familia, que estaba aparcada en una playa de las Landas (suroeste de Francia), y se los llevaron con el vehículo hasta una casa rural en Gurs.

Esa vivienda, ubicada a poco más de una veintena de kilómetros de la ciudad de Pau, había sido alquilada del 19 al 26 de agosto por Oihan Barandalla, uno de los que se sientan en el banquillo junto a, entre otros, varios antiguos jefes del aparato militar, y en particular Garikoitz Aspiazu Rubina, "Txeroki".

La familia de Orio permaneció confinada en una habitación de la casa durante dos días -los dos miembros de la pareja encadenados- y el domingo 26 fueron sacados y conducidos a un bosque de las Landas, donde hicieron noche con sus captores, que sólo los dejaron en libertad a la mañana siguiente.

La liberación se produjo horas después de que hubiera saltado por los aires su furgón en un campo de olivos de la provincia de Castellón, donde lo hicieron explotar Igor Portu y Martin Sarasola -ya condenados en España por ese dossier-, después de haber desistido, por la vigilancia que percibieron, del atentado que tenían planificado a unos kilómetros de allí, en la localidad costera de Oropesa.

Carimantran dio cuenta de los presuntos miembros de ETA cuyas huellas o trazas de ADN se localizaron en la vivienda de Gurs y que comparecen en París por esos hechos durante cuatro semanas, entre los cuales el propio "Txeroki"pero también uno de los que le sucedió al frente del aparato militar, Mikel Carrera Sarobe, "Ata".

En total, ocho de los diez que se sientan en el banquillo del Tribunal de lo Criminal de París están acusados por este secuestro -además de por otros cargos-, un delito que en Francia está penado con hasta 30 años de cárcel.

La policía antiterrorista subrayó el paralelismo de este secuestro con el cometido por ETA con un español que había acudido a una estación de esquí de los Pirineos franceses a finales de diciembre de 2006, y que sirvió para que la banda utilizase la furgoneta de esa persona para cometer el atentado del aeropuerto de Barajas del día 30 de ese mes, que causó la muerte a dos personas.

Sarasola y Portu, recordó Carimantran, también han sido condenados en España por la colocación del coche bomba en Barajas.

Al término de la audiencia de esta mañana, los acusados se quejaron ante el presidente, Jean-Pierre Ancel, de algunas condiciones a las que están sometidos durante el juicio y Barandalla, que hizo de portavoz de todos, amenazó con impedir que el proceso "se desarrolle normalmente"si no se atienden sus peticiones.