Política

Doctrina Parot

Los asesinos, recibidos como héroes

El miembro de ETA Jokin Mirena (con chaqueta verde), rodeado de familiares y amigos, abandona la prisión de Zuera
El miembro de ETA Jokin Mirena (con chaqueta verde), rodeado de familiares y amigos, abandona la prisión de Zueralarazon

La izquierda abertzale recibió a los ocho etarras excarcelados como si fueran héroes. Con la sensación de impunidad que les embarga tras la sentencia de Estrasburgo sobre la «doctrina Parot», un centenar de personas se concentraron a medianoche en el centro de Bilbao para dar la bienvenida a Joseba Artola Ibarretxe. Los proetarras no hicieron caso a las indicaciones de la Ertzaintza, que pretendía despejar la calzada para no obstaculizar la circulación, y acorralaron a los agentes de la Policía autónoma, hasta el punto de que los ertzainas tuvieron que lanzar dos disparos al aire sin carga para salvar la situación.

A pesar de que fueron varias las patrullas de la Ertzaintza que se desplazaron a la zona del puente de San Antón, y de que siete personas fueron identificadas, la concentración no se disolvió a instancias de la Policía vasca y continuó profiriendo gritos a favor de los presos de ETA y contra la Ertzaintza, dirigiéndose hacia el Casco Viejo, donde los proetarras se dispersaron. Las siete personas identificadas han sido imputadas por desórdenes públicos. Del recibimiento al terrorista con historial más sanguinario de los excarcelados, Domingo Troitiño, se encargó a su salida de la prisión coruñesa de Teixeiro el histórico miembro de los Grapo Suso Seoane, con quien le une una vieja amistad.