Política

El desafío independentista

Mas ultima el decreto para convocar la consulta del 9-N

Mas, aplaude rodeado de varios miembros de su gobierno, el pasado día 17
Mas, aplaude rodeado de varios miembros de su gobierno, el pasado día 17larazon

Llega la hora de la verdad. Tras un año y medio largo dando fuelle al proceso soberanista, las instituciones catalanas se preparan para el momento decisivo. El Parlament de Cataluña aprobará esta tarde la ley de consultas no refrendatarias, el instrumento que Artur Mas ha diseñado para habilitar la votación independentista del 9 de noviembre. Será una jornada sin sorpresas, pero de un enorme alcance político. El choque de trenes entre Gobierno y Generalitat estará servido.

Con la ley aprobada, tan sólo quedarán dos trámites para activar de forma definitiva el proceso electoral. El primero es la publicación de la norma en el Documento Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC), un punto imprescindible para la entrada en vigor de la ley. El Govern evitó aclarar si hará la publicación hoy mismo –aún tiene tiempo por la tarde– o si se esperará al día siguiente.

En todo caso, el presidente de la Generalitat tendrá hoy todo listo para poder firmar el decreto de convocatoria de la consulta. Sin embargo, el Govern quiso envolver este trámite final de cierto misterio para reservarse un último golpe de efecto. La firma de la convocatoria está únicamente en manos de Mas, que no necesita convocar a su Gobierno para dar este paso, aunque no es descartable que los cite en el Palau de la Generalitat e incluso a los líderes de las fuerzas políticas que apoyan el 9-N para dar mayor solemnidad a la firma.

Fuentes del Govern apuntaron que el dispositivo está listo para que Mas pueda firmar el decreto hoy una vez la ley de consultas sea aprobada por la tarde en la Cámara catalana, ya que, probablemente, el Boletín Oficial de la Generalitat (DOGC) lo publicará de forma electrónica inmediatamente.

El texto de la ley de consultas, que llega con 95 enmiendas parciales al articulado –43 del PPC, 14 del PSC, 3 de ICV-EUiA, 33 de C's y 2 de la CUP– consta en su redactado inicial de 56 artículos y varias disposiciones adicionales, transitorias y finales.

Anoche, el presidente catalán contrastó el «templo» de la democracia del Reino Unido y Escocia por haber hecho el referendo independentista con la «cueva» del Estado español, al tiempo que aseguró que no tiene «miedo» de eventuales medidas contra él derivadas de convocar la consulta.

Artur Mas no desveló si hoy mismo convocará la consulta, aunque no lo descarta: «Estas cartas no las desvelaré, porque esta es una partida en la que unos son muy fuertes y otros no tanto; y las cartas las tenemos que saber jugar a conveniencia de la estrategia catalana», informa Efe.

En una entrevista en el canal autonómico 8tv, Mas tildó de «escandaloso desde el punto de vista de calidad democrática» que miembros del Gobierno central «ya digan lo que dictaminará el Tribunal Constitucional» respecto a la ley de consultas y el decreto de convocatoria del 9-N antes de que sean aprobados. Sin embargo, Mas, el día en que el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, se reunió con los fiscales jefes de Cataluña por la consulta, dijo que no tiene «miedo» de eventuales medidas que se puedan aplicar en contra de su persona.