Investigación del 1-O: «Me veo con Mas y tengo reuniones con ERC»

La Guardia Civil indaga en la presumible «influencia» del ex president en la contratación de T-Systems para desarrollar el soporte digital de la república catalana.

La Guardia Civil investiga si el ex presidente de la Generalitat Artur Mas intervino en la puesta en marcha de los soportes digitales necesarios para impulsar las estructuras de Estado de la república catalana. Así consta en un informe remitido por el Instituto Armado a la titular del Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona, Alejandra Gil, en el que los agentes analizan las conversaciones y la documentación intervenidas a varios directivos de la empresa T-Systems investigados por su supuesta participación en la organización del referéndum ilegal del 1-O.

En una conversación el 18 de marzo de 2016 entre José Manuel Desco, ex director general de la citada sociedad tecnológica, y Rosa María Rodríguez Curto, directora de servicios, el primero se refiere a una cita prevista con el ex president, inhabilitado hasta febrero de 2020 por la consulta del 9-N de 2014. «Me veo con Mas y el partido el día 12», le cuenta antes de añadir: «Ya tengo reuniones con los secretarios de ERC en Economía. Si quieres comenta al equipo, prefiero no escribirlo por email». A lo que su interlocutora responde con una exclamación: «¡Qué fuerte! Ok, lo comento verbalmente».

Para la Guardia Civil, esta conversación refleja «el nivel de los contactos» que mantiene el director general de T-Systems «en el supuesto de corresponder el apellido Mas al del ex president Artur Mas y presidente de Convergencia Democrática de Cataluña» y de ser ciertas esas reuniones con altos cargos de ERC en la Conselleria de Economía. Además, añaden los agentes autores del informe, resultan también relevantes «las reservas que mantiene sobre estos contactos incluso a nivel de no dejarlos plasmados por email ni a los miembros de su equipo de trabajo», algo notoriamente inusual –resaltan– si mediante ese concurso público se desarrollaran «trabajos no opuestos a la legalidad».

La tensión entre los responsables de la Generalitat y los directivos de la empresa tecnológica investigada por su papel en el 1-O asoma en otra conversación entre ambos, en la que el responsable de T–Systems muestra sin tapujos su hartazgo con sus interlocutores en el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) de la Generalitat, a los que califica de «mierdas» y de quienes «todos están hasta los cojones».

«Impacto irreparable»

Un año después, el 25 de abril de 2017 –seis meses antes del referéndum independentista del 1-O– Rodríguez Curto, a vueltas con el CTTI explica al director general de su empresa que desde el organismo dependiente de la Generalitat le han trasladado que «si bloqueamos el proceso tendrán un impacto irreparable».

Mas también está presente en otras conversaciones intervenidas a la directora de servicios de la sociedad tecnológica que supuestamente debía garantizar a la Generalitat «la continuidad de los servicios» y la «estructura de mando de TIC (Tecnología de la Información y las Comunicaciones)» tras la desconexión con el Estado.

El 23 de junio de 2017, por ejemplo, en otra conversación intervenida a la directora de servicios de T-Systems un tal «Fer» confirma la asistencia de «todos» a una comida y alguien que se identifica como Osmar informa de una reunión de un tal Adolfo con el president Mas, que «no está relacionada con TS aunque puede salir “nuestra última conversación”». Esa posición, añaden, debe ser «empresarial y neutral», cumpliendo el contrato «salvo que haya una orden judicial, ¡como de costumbre!». «Para la Guardia Civil «parece un contrasentido» que se haga esa observación «para después pasar a hablar del entorno político que nada tiene que ver con el mercantil».

El informe incide en que «de resultar ciertas las referencias al ex presidente Artur Mas revelarían la influencia de éste con los programas y contratación de T-Systems, circunstancias que, evidentemente, no le corresponden al haber cesado en su cargo político» (en enero de 2016).

Una semana antes de esa conversación, el 16 de junio de 2017, Rodríguez Curto y su interlocutor, Osmar, se refieren a una reunión que habría mantenido este último con alguien sin identificar pero «con accesibilidad al president» (en esas fechas Carles Puigdemont), dado que se deja constancia de que «hablará con el president sobre el tema carta» y «transmitirá mensaje».

Asimismo, desde T-Systems se curaban en salud ante las exigencias de la Generalitat y recomendaban estar preparados «para la pregunta con el president: si vuelve a pasar el tema de pedir servicios dentro del contrato para temas 1-O cuál es la posición de TS».