Morenés reconoce que es difícil alcanzar la eficacia «sin dotación material»

Muy presente estuvieron ayer la crisis económica y los recortes que sufren las Fuerzas Armadas en el discurso del ministro de Defensa con motivo de la Pascua Militar. Desde el primer instante, Pedro Morenés dejó muy claro que durante el pasado año 2013 lo más difícil fue «mantener operativas, haciéndolas más eficientes aún, las capacidades militares con las que España cuenta». Y hacerlo en paralelo, solidariamente, con las restricciones presupuestarias que todos los españoles afrontan para salir de la crisis. Para el ministro, hacer lo mismo, o más con menos, «ha supuesto un enorme esfuerzo tanto desde el punto de vista material como intelectual, pero también un ejercicio de responsabilidad que nos llena de satisfacción». Apenas llevaba un minuto hablando cuando volvió a transmitir el mismo mensaje que pronunció el pasado mes de octubre el secretario de Estado de Defensa, Pedro Argüelles, cuando presentó los presupuestos para 2014: «Nos estamos acercando a una situación límite». Y es que, las cuentas de Defensa para este nuevo año son un 32,4 por ciento inferiores a las de 2008.

Pese a ello, y aunque el eje central de su discurso eran los recortes, Morenés también quiso mostrarse optimista de cara al futuro: «El año que dejamos atrás estuvo cargado de situaciones difíciles que hubo que superar; y también de nuevas tareas a desarrollar que las Fuerzas Armadas han sabido encarar con buen ánimo y la convicción de que España se abrirá camino, lo está haciendo ya, hacia un futuro mejor cada día». Y de ese éxito y solidaridad responsabilizó también a los militares españoles: «Han sido solidarios con la situación general de España y con los sacrificios y esfuerzos de sus conciudadanos en los momentos más duros. Ellos han sido los primeros en adaptar su actividad a unos presupuestos muy limitados, y lo han hecho manteniendo en lo más alto su capacidad y nivel de preparación». Por este motivo, se mostró totalmente convencido de que «seguirán siendo solidarios en el futuro, y también de que la sociedad española sabrá responder a ese esfuerzo y a su trascendental misión dotándolos de los medios acordes a las necesidades de una Defensa que en este inestable mundo adquiere si cabe más importancia». «Medios», algo que con los años se está convirtiendo en un lujo en unas Fuerzas Armadas que ven cómo se reducen las horas de adiestramiento, las de vuelo, cómo numerosos buques no salen a la mar o cómo la munición es un bien escaso. Así que aprovechó para hacer su demanda asegurando que «resultaría difícil» que los militares «pudieran alcanzar un excelente nivel de eficacia sin la dotación material que les permitiera estar en el estado del arte que les demanda la propia sociedad».

Pero además de los recortes, Morenés también tuvo palabras de reconocimiento para los efectivos que han estado y están desplegados en misiones en el exterior y recordó como gran éxito de 2013 el repliegue del contingente español desplegado en la provincia afgana de Badghis. Para terminar, quiso destacar la callada misión de los miembros de las Fuerzas Armadas, los cuales garantizan «el bien común de toda la sociedad española».

Disciplina, obediencia y jerarquía

En presencia del ministro del Interior, Morenés quiso hacer un guiño a los valores que unen a la Guardia Civil y a las Fuerzas Armadas. «Son conscientes de su responsabilidad y que la esencia de este comportamiento está en los valores de la disciplina, obediencia y jerarquía que forman la columna vertebral del comportamiento del militar», dijo.