CUP

Morenés visita Cataluña en plena caza de brujas contra las Fuerzas Armadas

El Ayuntamiento de Gerona crea un código ético para tratar de expulsar a los militares de la Feria Educativa.. El ministro visita mañana un cuartel en Barcelona y otro en Gerona pese al rechazo de la CUP

El patio de armas del Cuartel del Bruch, en Barcelona, preparado para una ceremonia de Jura de Bandera
El patio de armas del Cuartel del Bruch, en Barcelona, preparado para una ceremonia de Jura de Banderalarazon

El Ayuntamiento de Gerona crea un código ético para tratar de expulsar a los militares de la Feria Educativa. El ministro visita mañana un cuartel en Barcelona y otro en Gerona pese al rechazo de la CUP

Con la nueva polémica sobre la presencia de las Fuerzas Armadas en las ferias de Educación catalanas –en esta ocasión en Gerona–, el ministro de Defensa en funciones, Pedro Morenés, viaja mañana a esta ciudad y a Barcelona para visitar diferentes unidades militares. Lo hace justo un día después de que el Ayuntamiento gerundense (CDC) anunciara que el Patronato de la Feria de Gerona ha aprobado «un código ético para fomentar el respeto de los valores de la paz y los derechos humanos». Se trata de una especie de requisito que regulará la presencia de expositores en la muestra y que, sin citarlas, alude a las Fuerzas Armadas. Ya hace tiempo que la alcaldesa, Marta Madrenas, mostró su intención de sacar a los militares porque no se sentían «cómodos con su presencia». Y esta parece ser la forma de «deshacerse de ellos». O, al menos, un primer paso para intentarlo. Una historia que recuerda mucho a la de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y su rechazo en público al stand militar en la Feria de Barcelona, el único que aún estaba abarrotado con la muestra ya cerrada...

Sin embargo, pese a este anuncio cargado de intención, no hay ninguna decisión oficial y vetar a las Fuerzas Armadas es un decisión que no depende únicamente del Consistorio, sino de la que participan otros actores, públicos y privados. De hecho, desde la subdelegación de Defensa en la ciudad aclaran que no han recibido notificación alguna al respecto y dejan claro que, por ahora, «es mentira» que hayan expulsado a las Fuerzas Armadas de la Feria. Pero la polémica vuelve a estar servida.

Y este es el contexto en el que viaja hoy Morenés a Cataluña. En primer lugar visitará el acuartelamiento barcelonés de El Bruch, que la pasada semana fue visitado por más de 12.000 personas con motivo del Día de las Fuerzas Armadas. Allí, además de recibir un punto de situación sobre las unidades y visitarlas, mantendrá un encuentro con sus efectivos y los mandos.

Desde ahí viajará hasta la localidad gerundense de Sant Climent Sescebes, gobernada por ERC, donde está situado el Regimiento de Cazadores de Montaña «Arapiles 62». De nuevo, recibirá información de la situación de la unidad y sus efectivos, y observará un ejercicio de combate urbano y otro de tiradores de precisión. Como era de esperar, los independentistas no han tardado en reaccionar y ayer, por medio de un comunicado, la CUP mostró su rechazo a la visita por «la promoción de la cultura militar y bélica por parte de las Fuerzas Armadas españolas», informa Efe.

En cuanto a las relaciones Cataluña-militares, en el punto de mira en los últimos meses, parten, entre otros, de un Convenio de 2000 entre la Generalitat y el Ministerio para “la realización de actividades culturales, formativas y sociales”. En él se acuerda desarrollar una serie de actividades para, entre otros, mejorar el conocimiento de la Cultura de Defensa, como es el caso de programas de «Información juvenil» o de «Formación».

De hecho, pese a la caza de brujas de determinados consistorios contra el Ejército, sólo el pasado año 1.860 catalanes solicitaron su ingreso en las Fuerzas Armadas, un colectivo del que sus alcaldes prefieren olvidarse. No todos, porque sí que ha habido independentistas, como los de Talarn, que defendían la presencia del Ejército. Por motivos económicos, eso sí.