Crecimiento económico

Rajoy ve lógico el impacto de la crisis y entiende la protesta

La Razón
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El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ve «lógica la contestación social» que se ha producido en España a muchas de las medidas económicas tomadas por el Ejecutivo, pero defendió que estos «grandes esfuerzos y sacrificios» permitirán la salida de la crisis.

Madrid- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ve «lógica la contestación social» que se ha producido en España a muchas de las medidas económicas tomadas por el Ejecutivo, pero defendió que estos «grandes esfuerzos y sacrificios» permitirán la salida de la crisis. «Es imposible negar que la crisis que vivimos está teniendo un impacto social tremendo. Es lógico y sintomático de la buena salud de nuestras democracias que exista una contestación social a muchas de las medidas políticas que se toman para permitir la salida de la crisis sobre bases sólidas y estables», afirma Rajoy en declaraciones a Lusa, la agencia nacional de noticias de Portugal. «Pero creo firmemente que la política no es el problema, sino la solución a la crisis actual, que requiere de grandes esfuerzos y sacrificios para permitir el regreso tan pronto como sea posible a los niveles de prosperidad y de empleo que nuestras sociedades merecen», agregó. La entrevista fue realizada por correo electrónico a la agencia Lusa, en vísperas de la Cumbre Ibérica XXVI, que tendrá lugar hoy en Madrid, y en la que Mariano Rajoy y el primer ministro portugués Pedro Passos Coelho, reúnen a las delegaciones de los dos Gobiernos. Preguntado sobre la protesta social en España, Rajoy considera que la crisis ha demostrado «la insostenibilidad de los graves desequilibrios que se han creado en la mayoría de países de la zona euro», debido a «defectos de diseño económico y también a las políticas monetarias (...) la falta de reformas y (...) el mal gasto público». «En la actualidad, estos desequilibrios se están corrigiendo y estoy seguro de que dentro de poco vamos a empezar a ver los frutos de estas políticas en la forma de crecimiento y creación de empleo», afirma Rajoy. Para Rajoy, éste será «un triunfo de la democracia», ya que las respuestas a la crisis «están siendo manejadas por las instituciones con legitimidad democrática plena». «Ahora estamos en el periodo de adaptación, de transición. Pero la democracia, junto con nuestro modelo socio-económico, saldrán reforzados», dice. El jefe del Gobierno rechaza que España sea un país dominado por la corrupción, teniendo en cuenta que se trata de una nación democrática, regida por el imperio de la Ley, plenamente transparente y firmemente comprometida con la lucha contra la corrupción. «No hay que confundir los casos aislados de corrupción o de reprobable conducta personal, que de hecho están siendo perseguidos y que están en manos de los jueces, con una impresión de un país corrupto, que se caracteriza precisamente por no perseguir estos casos, como estamos haciendo aquí», señala. También sobre la posibilidad de determinar la responsabilidad en el origen de la crisis, Rajoy dice que «si hay responsabilidad, será perseguido y enjuiciado». No obstante, considera que «la principal responsabilidad de la crisis recae en un modelo y unas políticas insostenibles», y señala que su Gobierno está haciendo «todos los esfuerzos para evitar situaciones similares en el futuro».