Un amigo invisible muy Real

Toda la familia Borbón, excepto los duques de Palma, se reunió el día de la Natividad en La Zarzuela hasta prolongada la tarde.

Un año más, el día de Navidad ha sido la excusa para que la Familia Borbón al completo se haya reunido en el Palacio de La Zarzuela. Salvo los duques de Palma y su prole. En el salón del palacio, los Reyes, y los Monarcas Eméritos Don Juan Carlos y Doña Sofía, la Princesa de Asturias, la Infanta Leonor, Doña Elena con sus hijos Froilán y Victoria Federica, y las hermanas de Don Juan Carlos, Doña Pilar y Doña Margarita con sus respectivos hijos, se reunieron por la fiesta.

Primero, celebraron a la una la misa de Navidad, en la que leyó una de las lecturas la hija menor de la Infanta Elena. Después, la familia al completo pasó al salón, cuyas paredes preside un retrato del abuelo del Rey, Don Juan de Borbón. En él aparece ataviado con el uniforme de almirante de la Armada Española y luciendo en la corbata la insignia del toisón de oro, distinción que su padre Alfonso XIII le concedió en 1927, cuando el padre de Don Juan Carlos contaba con 14 años de edad.

De menú se sirvió sopa de pescado y almejas, lomo de rodaballo y pavo, sin faltar el tradicional «pudding» de Navidad y otros platos más ligeros. Sentados, como marca el protocolo, de forma alterna hombres y mujeres, mantuvieron una animada conversación que se prolongó hasta bien entrada la tarde. Según cuentan personas cercanas a la familia, casi todos llevaron puesto algo rojo por la flor de Pascua. La mesa estuvo muy decorada: sobre un mantel rojo, árboles de Navidad en miniatura se colocaron delante de cada comensal, y como centro de mesa se escogió una gran planta con la flor de Pascua.

Unos gemelos con la flor de lis

Este año se ha mantenido el tradicional amigo invisible en toda la familia y, entre otros regalos, a Don Felipe le «tocaron» unos gemelos con la flor de lis.

Según cuentan las mismas fuentes, después de la comida la sobremesa duró largas horas –hasta las siete, aproximadamente–, y el trato con Don Juan Carlos era más relajado al no ser ya Rey de España. También informan de que es él mismo quien propicia ese ambiente.

Las que primero abandonaron el salón fueron la Reina Doña Sofía y Doña Letizia, que se llevaron a las niñas pequeñas a ver una película de dibujos animados de pingüinos.

En Nochebuena, la familia sí se dividió. Dos días después de que el juez Castro anunciara su decisión de sentar en el banquillo de los acusados a la Infanta Cristina por dos delitos fiscales, los Reyes Eméritos telefonearon a su hija, quien les informó de que no iría a pasar la Navidad junto a ellos, aunque sí estaba previsto que viajara a Vitoria para pasar las fiestas navideñas junto a la familia de Iñaki Urdangarín. Los Reyes cenaron en La Zarzuela con la madre de Doña Letizia, Paloma Rocasolano, y las niñas. Desde allí siguieron por televisión el primer mensaje de Navidad del Rey a los españoles, que se grabó el pasado día 22.

Por su parte, el clan familiar de Doña Pilar y el de Doña Margarita cenaron en casa de la hermana mayor de Don Juan Carlos. Al igual que el día de Navidad, asistieron los hijos de la hermana mayor del Rey Don Juan Carlos: Simoneta, Juan, Bruno, Beltrán y Fernando. Por parte de la hermana menor de Don Juan Carlos también acudieron sus dos hijos, Alfonso y María. Según cuentan, Don Juan Carlos, además de llevar una vida saludable, sigue manteniendo un papel activo en sus funciones institucionales, ya que el día de Nochebuena se levantó a primera hora de la mañana para tener una audiencia privada. Después, los Reyes Eméritos no asistieron a la cena en casa de Doña Pilar, pero Don Juan Carlos sí se acercó sobre las once de la noche para estar con sus hermanas y sus familias. Las mismas fuentes no precisan con quién cenó Doña Sofía, pero con toda probabilidad lo haría en compañía de su inseparable hermana Irene. Después de estas fiestas navideñas cada núcleo familiar pondrá rumbo al lugar de descanso que prefieran. Estas fuentes aseguran que durante la comida de Navidad no se revelaron los destinos de cada uno.

Como es tradición desde hace unos años, Zarzuela no informará del paradero de cada uno, ya que la Casa entiende que concierne a la vida privada de cada uno. Año tras año las especulaciones sobre el destino de los ahora Reyes han protagonizado las páginas del papel «couché», pero sin informaciones certeras. Por su parte, las hijas de los Reyes empezaron las vacaciones el día 19 de este mes, y durarán hasta el 8 de enero. Lo que sí es seguro es que Don Felipe y Doña Letizia tendrán que estar en Madrid antes del día 6, ya que el Jefe de Estado presidirá por vez primera la Pascua Militar como Rey de España y Jefe Supremo de los tres Ejércitos.

Doña Elena y Doña Cristina, en Vitoria y Baqueira

Doña Elena y Doña Cristina serían las que mantendrían sus tradicionales destinos: la hermana menor del Rey, en Vitoria, y la mayor a esquiar a Baqueira acompañada por sus hijos. Es precisamente Doña Elena quien más mantiene las costumbres de la familia, como en este caso, ya que era costumbre que en las Navidades se fueran a esquiar todos juntos.

Otra de las tradiciones que este año se ha suspendido, al menos de momento, es la aparición pública en algún cine o teatro para dar imagen de unidad en estas fechas tan familiares. El año pasado únicamente la protagonizaron los entonces Príncipes de Asturias, quienes fueron a ver la película «12 años de esclavitud» y después cenaron kebab y bailaron rock en el local de moda Pirandello. Sin embargo, en 2012 las mujeres de la Familia Real sí se reunieron en el teatro Coliseum de la capital para ver el musical «Sonrisas y lágrimas». Y el año anterior, antes de Nochebuena, Doña Sofía junto a su hijo, Doña Letizia, y la Infanta Elena asistieron al espectáculo organizado por El Circo del Sol. Este año «chi lo sa» cómo resolverán Don Felipe y Doña Letizia sus primeras Navidades como Reyes de España.