Gastronomía
Cal Paradís y el heroísmo
Sí, hay que ser un héroe para en el territorio interior de la provincia de Castellón, concretamente en Vall d’ Alba, orquestar un menú degustación de búsqueda y osadía. Miguel Barrera, como un caballero andante y con sólo tres personas que le ayudan en fogón y sala, en zona gastronómica hostil para los experimentos, lleva años reivindicando la cocina elaborada y en construcción. Como suele pasar con quien defiende causas nobles, a veces se cometen excesos e idealizaciones. Su compromiso con la causa es admirable.
La defensa del castillo la empalizan buenas entradas, que incluyen un excelente caldo de verduras a la brasa con toque de oloroso y guiño de hierbabuena, una saladita brandada de bacalao, un buen boquerón marinado, el actual e inevitable (¿pasará esta moda?) brioche de queso de cabra y el espléndido calabacín baby con recuerdos ahumados. Más en la misma línea, con una flor de calabacín rellena de requesón dominante con anchoa, junto a una interesante pata de pollo crujiente a l’ ast con velo de cartílagos, un tomate semi-seco sobre caldo de calabaza y espinas de sardina o un académico plato de espárragos con huevas de trucha. Hay cierta falta de trama en la combinación del langostino, la trufa de verano y setas con crema de guisantes, que se supera con la pulcra y equilibrada armonía del sepionet y el caldo de jamón... gran plato. Es notable el riesgo y valor con la molleja de cordero con caviar ecológico con una crema de sesos del mismo animal, o con la vibrante ventresca de atún sobre escabeche de perdiz. El pregón salado culmina con un buen pescado de roca, la corva, un pelin hecho, y un estupendo lomo de cierva. Atinada parte dulce, con fresas a la pimienta negra, para salvar los honores. El servicio es cariñoso y personal. Y la carta de vinos, un canto al justiprecio y a la variedad nacional y forastera.
Anoten una decena de champagnes sobre los 55 euros. En definitiva, Miguel Barrera y su coquinaria caballeresca.
Cocina: 7,5 Bodega: 7 Sala: 7 Felicidad: 7,5
Dónde: Av. Vilafranca,30. Vall d’Alba.
Tel.: 964 32 01 31.
Precio del menú: 110 euros.
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