Megxit

El príncipe Guillermo, “triste y conmocionado” tras la decisión de los duques de Sussex

El duque de Cambridge está “muy molesto” por el comportamiento de su hermano tras su decisión de abandonar definitivamente la vida real

Hace tan solo unos días contamos en este mismo periódico que el príncipe Harry y Meghan Markle, afincados en California, habían decidido cortar definitivamente sus lazos con la Familia Real. Lo cierto es que nadie esperaba su regreso. Las relaciones, de hecho, no han hecho otra cosa que enfriarse, con todas las cuestionadas decisiones que la pareja ha tomado en el último año. Como por ejemplo, batallar distintas disputas legales con los medios británicos pidiendo respeto a su intimidad, para luego acordar una entrevista con Oprah en uno de los programas de máxima audiencia en Estados Unidos. Pero tras el sonado Megxit, se les concedió un periodo de reflexión y había que cumplir ahora con las formalidades.

El pasado 19 de febrero Buckingham Palace emitió un comunicado donde explicaba que mantienen el título de los duques de Sussex, pero pierden todo lo demás, es decir, patronazgos y honores militares, algo especialmente doloroso para el príncipe, quien ha dicho en numerosas ocasiones que los años en el ejército fueron de los más importantes de su vida, los que le han definido.

Príncipe Harry y Meghan, duques de Sussex
Príncipe Harry y Meghan, duques de SussexSimon DawsonAP

“Muy molesto por lo sucedido”

Ahora, es el duque de Cambridge el que ha reaccionado a tal sorprendente anuncio. Según publica ‘The Times’, Guillermo se siente “muy triste y sorprendido” por el comportamiento de su hermano tras su decisión de abandonar definitivamente la vida real.

El mismo medio recoge que fuentes cercanas al príncipe Guillermo dijeron que él creía que los duques de Sussex habían sido “insultantes e irrespetuosos” con la reina, y que estaba “muy molesto por lo sucedido”. Una nueva disputa entre ambos que podría convertirse en la ruptura más grave entre hermanos de la realeza desde que Jorge VI accediera al trono en 1936 por la abdicación de su hermano mayor, Eduardo VIII.