Antonio Banderas repite rubia

Los cambios nunca vienen solos, y menos aún cuando se trata de una ruptura. A principios de junio se confirmaba lo que era un secreto mal guardado: Antonio Banderas y Melanie Griffith ponían fin a más de 18 años de matrimonio y las vidas de ambos daban un vuelco de 180 grados. Los motivos apuntaban en todas direcciones: las adicciones de ella, el cansancio de él, los celos de ella, los escarceos de él... Una sucesión interminable de suposiciones y rumores que decidieron no alimentar. De hecho, Antonio Banderas confesó a la Prensa: «He llegado a un acuerdo con la mujer con la que he compartido 20 años maravillosos: mantenernos ambos en un plano de discreción, y yo quiero ser un caballero y no romper ese acuerdo». Pero si bien el intérprete de «La máscara del Zorro» sigue guardando silencio respecto al divorcio y a sus posibles desencadenantes, ya no parece hacer de la prudencia su seña de identidad. Banderas ha rehecho su vida, o al menos eso evidencia el papel cuché: ha vuelto a ser pillado con la misteriosa rubia con la que se ya se le vio bailando ardorosamente en una fiesta en Cap d'Antibes en el Festival de Cannes en mayo, semanas antes de que se conociera la noticia de su separación de la actriz de la que se enamoró en «Too much».

Las fotos del malagueño con la atractiva joven inundaron ayer las revistas del corazón: ambos acudieron la semana pasada a cenar al restaurante L'Opera de Saint Tropez, a pocos kilómetros de Cannes. En las fotografías que aparecen en la revista «Lecturas», el actor intercambia confidencias y arrumacos con su acompañante en el interior del local en lo que evidencia una relación sentimental entre ambos.

Los tabloides británicos también se hacen eco del nuevo idilio de nuestro intérprete más internacional y aportan más detalles de la velada. Al parecer, Banderas y la chica salieron juntos del restaurante y se retiraron a bordo de un barco, que, según informa el «Daily Mail», les llevó al hotel del actor. «¡Hola!», por su parte, revela que la mujer con la que cenó en Saint Tropez es la misma que recientemente acompañaba también al actor en Cannes, algo que evidencian las fotografías de ambos encuentros.

- DE HOLLYWOOD A SAINT TROPEZ

«No sé qué haré, ahora mismo le estoy dando la vuelta al mundo», confesaba Banderas a LA RAZÓN en la Gala Starlite. Y lo cierto es que el actor aún desconoce dónde va a establecer su residencia permanente: por una parte, ha comprado y reformado un ático en Málaga, su ciudad natal, y se confiesa amante de Andalucía y de España; por otro, el trabajo le obliga a estar constantemente haciendo las maletas y Nueva York o Los Ángeles son sus «sedes de trabajo». Pero con esta reciente conquista, un nuevo escenario posible ha irrumpido en la vida del artista, que también quiere estar cerca de su hija, Estela del Carmen: el sur de Francia parece haberse convertido en su destino favorito. ¿Cambiará Banderas la costa californiana por la Riviera francesa?

Nuevos proyectos

«Autómata», en San Sebastián

«Autómata», la nueva película que produce y que además protagoniza Antonio Banderas, competirá por la Concha de Oro en la 62ª edición del Festival internacional de Cine de San Sebastián. Este filme es un thriller futurista que utiliza como principal argumento la teoría de la singularidad tecnológica en la que los robots superan una vez más la inteligencia humana. Significará el debut del intérprete en este género fílmico. Otros estrenos suyos este año incluyen «Knight of Cups», «The SpongeBob Movie: Sponge Out of Water», «33 días» y «Dear Mister Obama».

Madre e hija, inseparables

Melanie se refugia en Estela del Carmen

Melanie Griffith ha encontrado un apoyo incondicional en su hija Estela del Camen. De hecho, según «¡Hola!», la actriz habría solicitado su custodia. Últimamente se las ha visto pasar mucho tiempo juntas: se trasladaron a Suiza, donde además de hacer turismo, acudieron al Festival de Cine de Locarno, en el que la actriz presentó el cortometraje en el que ha participado, «Thirst», y, a su vuelta a California, madre e hija disfrutaron de una tarde de «shopping». Días después, acudieron a hacerse la manicura a un centro de Los Ángeles.