Marca España para los «babyroyals»

Sus tiendas están colapsadas. Medios y curiosos se acercan estos días a Mos, el pueblo de Vigo en el que se localiza su fábrica. A sólo 20 metros vive Pilar Rodríguez, «como los empresarios antiguos», bromea. La directora de la firma de moda infantil y puericultura Pili Rodríguez ha saltado al panorama mediático después de que las princesas de los Países Bajos deslumbraran al mundo con tres de sus vestidos. Catalina Amalia (la nueva heredera), Alexia y Ariane llevaron la moda española a Holanda y, en consecuencia, al resto del mundo. Cuando las pequeñas salieron al balcón del palacio real de Ámsterdam, la noticia corrió como la pólvora. Confeccionados en jacquard amarillo, con cuello barco, lazo en la cintura y espalda cruzada con botones de cristal, y armados con un volante de tul y diademas a juego coronadas con una flor amarilla, los vestidos, de 165 euros cada uno, causaron sensación al momento.

Pero no son los únicos que habían enamorado a Máxima de Holanda. El día anterior a la investidura, las tres pequeñas lucieron otro modelo de la firma: un vestido primaveral de estilo marinero en blanco, azul marino y el alabado amarillo. Y es que si de algo tiene que estar orgullosa esta firma gallega con 50 años de trayectoria es de ser la elegida por las grandes familias reales y de la aristocracia de todo el mundo para vestir a sus hijos.

De todos es sabido que Doña Letizia apuesta por la moda española en todas sus vertientes. Y si lo hace para elegir sus propios estilismos, no iba a ser diferente con las infantas. Leonor y Sofía visten a menudo de firmas nacionales, y una de las preferidas de la Princesa es, precisamente, Pili Carrera. Las nietas del Rey cuentan con diversos modelos de la casa que van desde alegres vestidos que utilizan en verano hasta modelos de ceremonia, como los grises de lana fría con lazos de terciopelo morado que llevaron en la misa conmemorativa del centenario del nacimiento de su abuela, Doña María, madre del Rey.

Los numerosos primos de las infantas también son fieles clientes de la firma gallega. Quienes mejor lucen sus diseños son Victoria Federica, la hija de la Infanta Elena, y los tres pequeños de Luis Alfonso de Borbón. El primo del Príncipe Felipe compraba asiduamente en la tienda que Carrera tiene en Miami cuando residía allí, y su mujer, la venezolana Margarita Vargas, se decantó por su línea de puericultura para decorar la habitación de las dos pequeñas del matrimonio.

A todos los rincones

Las demás casas reales también han hecho sus pedidos a Pili Carrera, pero la firma no quiere utilizarlo como escaparate publicitario. «Para nosotros, todos nuestros clientes son igual de importantes», sentencia Pilar. Sin embargo, su objetivo es llegar a todos los rincones de la «royalty class», razón por la que tienen pensado enviar varios modelos a Kate Middleton. «Queremos que la Duquesa de Cambridge conozca nuestros productos, así que cuando se sepa el sexo del bebé que espera, le enviaremos nuestros catálogos y varias prendas», confiesan emocionados.

Y como la clave de un negocio está en saber expandirse, la firma no se pone límites y aspira también a llenar los roperos de los hijos de la «high class». La actriz Gwyneth Paltrow llegó a recomendar sus colecciones en su página web, y uno de sus mayores clientes es Enrique Peña Nieto, presidente de México. A Pili Carrera le hace especial ilusión que se publiquen fotos familiares del político con sus conjuntos de cuadros de «vichy» o sus vestidos estampados de flores verdes y lilas: «Cuando veo a los seis hijos vestidos iguales con mis diseños me emociono enormemente. Es un privilegio», afirma. Y es que la diseñadora se ha convertido, de la noche a la mañana, en la mejor embajadora de la moda infantil española en el extranjero.