Twitter: a favor en contra bien o mal

MADRID- Twitter sigue siendo el nexo de unión de la movilización. Si los primeros días sirvió para reunir a los convocados, ahora se ha convertido en un maremágnum de voces en el que todos participan. La cuenta @acampadasol ha reunido a más de 20.000 seguidores en apenas unos días y cualquier tema relacionado con el fenómeno es, inmediatamente, trending topic mundial, es decir, en las palabras más utilizadas en Twitter en un momento dado. Todo el mundo habla de ello en la red, a favor o en contra, bien o mal, pero está ahí, protagonizando todas las conversaciones. Críticas a la policía y a los políticos por permitir las concentraciones y críticas a los políticos y a las instituciones por tratar de prohibirlas. Internet es el altavoz total.
Pero los concentrados también le han encontrado otro uso a Twitter: a través de @acampadasol se van actualizando las necesidades de los acampados: «Necesitamos papel continuo, bridas, sillas plegables, pizarras blancas, mantas, sacos de dormir, comida, martillos, cuerda larga, menaje, papel higiénico, escobas, recogedores, alambre, transporte, altavoces con amplificador integrado», han enumerado sólo a lo largo de la tarde de ayer jueves.
Y no sólo en Twitter. También en Facebook, la red social más utilizada del mundo, sus páginas cuentan con miles de amigos. Así, «Democracia Real Ya» cuenta con cerca de 190.000 amigos. Por su parte, «Acampada en Sol» también dispone de su propia página.
Por su parte, la página de «Democracia Real Ya» en la red social española Tuenti experimentó un «pico» de suscripciones después de que la Junta Electoral de Madrid prohibiera la concentración del miércoles, habiendo superado ya los 54.000 usuarios suscritos a Tuenti.
Paralelamente, se han creado también diversas páginas web entre las que destaca tomalaplaza.net en la que incluyen un listado de todas las ciudades de España y el extranjero en las que se están produciendo concentraciones similares.
Otra de las páginas es democraciarealya.es, donde se puede firmar un manifiesto que recoge las peticiones y «principios» que rigen este movimiento.