«Por qué no tiras»

GDANSK- La violencia nunca ha sido la manera de actuar de la Selección española. Ni siquiera en el disparo. El estilo de la campeona del mundo es diferente, es llegar al toque hasta meter la pelota en la portería con suavidad. «¡¡¡Tira!!!», se escuchó en el campo cuando Busquets se dejó el balón atrás solo delante del portero. Quiso dar un toque de más el centrocampista del Barcelona y lo que era una ocasión se convirtió en un balón perdido. Lo mismo sucedió cuando a Cesc le quedó una pelota para su pierna izquierda después de un regate y quiso hacer uno más para que el disparo fuera todavía más claro. Otra pelota perdida en el borde del área. «¿Por qué no tiras?», volvió a escucharse.

Pero el gol llegó como debía. No se sabe si Navas tiró o se metió en la portería con el balón. La jugada que busca «La Roja» salió por fin. Aunque para eso tuvieron que abrirse los espacios. Cesc mandó la pelota a la espalda de la defensa, controló Iniesta y se la dejó a Navas para empujar en un dos contra uno ante Pletikosa. «Hemos madurado el partido, hemos controlado la pelota y al final hemos encontrado el gol», dice Navas.

El extremo era lo que España necesitaba para acelerar el ritmo, para hacer menos previsible su ataque. Los equipos se encierran, le cierran el centro a la campeona del mundo y le ofrecen las bandas. Pero por ahí sólo aparece Jordi Alba. A España le falta un futbolista que rompa, alguien que acelere el ritmo. El Barcelona tiene a Messi, pero España no tiene a nadie. Tenía a Torres, pero al delantero del Chelsea le faltaban espacios. Torres se movía por todo el ataque para abrir huecos, pero le faltaba el aire. Por eso se hacía necesario Navas, la sorpresa, el jugador que rompiera «el ritmo cansino» de la Selección, como dice Vicente del Bosque.

Pero el partido era sólo una cuestión de supervivencia. «Nos vimos fuera en algún momento», cuenta Busquets. «Nos hemos quitado un peso de encima», reconoció el seleccionador. «Cada partido es complicado aquí y hoy también lo ha sido. Teníamos que pasar a cuartos y lo hemos logrado. Estamos felices», reconoce Silva. «Sabíamos que Croacia nos iba a costar. Es un gran equipo, como ya ha demostrado en el torneo, y tenía mucho en juego», afirma el canario.
«Queríamos ganar el partido. No nos conformábamos con otra cosa», asegura Xabi Alonso. La mitad del trabajo en el torneo ya está hecho.