La ovación más prolongada en apoyo a la Corona

Madrid- No se recuerda aplauso más prolongado en este hemiciclo. Dura exactamente un minuto y cincuenta ocho segundos. El recibimiento no puede ser más afectuoso en un momento tan delicado para la Corona. Diputados, senadores y autoridades aplaudieron tan sostenidamente la llegada de los Reyes a la Cámara Baja, que Don Juan Carlos llegó a hacer un gesto con las manos para que cesara la ovación, pero los casi 600 parlamentarios la sostuvieron como muestra de apoyo a la Corona. «Viva el Rey», gritó una voz anónima desde la bancada popular cuando acaba el aplauso general, al que Rosa Díez (UPyD) se sumó con desgana. Los únicos que no hicieron ademán de seguir el aplauso fueron Cayo Lara (IU), Josu Erkoreka (PNV) y Utxue Barkos (Geroa Bai), mientras que los de Amaiur y ERC no se molestaron en acudir a la sesión. El apoyo de las Cortes a la Corona se repitió con otra intensa ovación, al término de las palabras con las que Don Juan Carlos abrió la X Legislatura, pero también se reflejó en el discurso del presidente de la Cámara Baja. Jesús Posadao aprovechó para avisar a diputados y senadores de la «responsabilidad histórica» que afrontan en esta nueva etapa parlamentaria, pero sobre todo para reivindicar la Corona como «símbolo de la unidad y permanencia del Estado, árbitro y moderador del funcionamiento regular de las instituciones». La presencia de los Reyes no era, a su juicio, sólo una tradición, ya que recordó que en estos 26 años la Corona «fue la que impulsó el camino hacia la democracia y las libertades» y «la piedra angular en la elaboración de la Constitución de 1978». «Ha sido en todo momento (...) un fundamento de extraordinaria robustez para la conso. lidación de una sociedad democrática, equilibrada y cohesionada. Gracias por su abnegado e infatigable servicio a la Nación y a todos y cada uno de los españoles», concluyó.