De Guindos aprieta para lograr el mejor crédito para la banca

MADRID- El Gobierno tiene previsto hacer públicas hoy las conclusiones de los informes de Oliver Wyman y Roland Berger sobre la necesidades de capitalización de la banca española a cierre de mercado. En Luxemburgo, Luis de Guindos será el encargado de ofrecer los datos y la hoja de ruta de nuestro sistema financiero para los próximos meses en la reunión del Eurogrupo, en la que se espera que el Gobierno presione hasta el límite para negociar las mejores condiciones de la ayuda de hasta 100.000 millones de euros acordada el pasado día 9.

A medida que se acerca el momento de la verdad cobra fuerza la cifra de 65.000 millones de euros con la que el Gobierno cuenta y el mercado también. Esta cantidad es equidistante entre la que fijó inicialmente el Fondo Monetario Internacional y la que ha autorizado el Eurogrupo.

Incertidumbre
En la capital comunitaria se cree que la falta de detalles sobre la línea de crédito que solicitará España está generando incertidumbre en los mercados de deuda y en los bursátiles. La banca española ha sido fuertemente castigada en Bolsa, con la excepción de los dos grandes bancos, Santander y BBVA, que tienen fuera de nuestras fronteras la mayor parte de su negocio. Bankia encabeza las pérdidas en lo que va de año. Sus acciones han perdido un 76,33% de su valor, con Popular (-48,31%) y Bankinter (-47,83%) acompañándole en el castigo.

Ayer, la canciller alemana, Angela Merkel, subrayó la importancia de que la solicitud de España sea concreta. «Sabemos que España quiere presentar una solicitud para la recapitalización de los bancos y creo que es muy importante que sea específica; que los mercados sepan qué hay detrás, porque precisamente los bancos tienen un papel clave».

La deuda y la banca
Puede que no le falta razón. En los últimos meses, y sobre todo después de la segunda inyección de liquidez del Banco Central Europeo a tres años, la banca española ha utilizado el dinero recibido al 1% para comprar deuda española. En las circunstancias actuales, el peso de ésta en los balances de los bancos puede ser un lastre a la hora de su saneamiento. En las dos subastas del BCE la banca española se «llevó» alrededor del 25% del total, lo que equivale a más de 230.000 millones de euros. Según los últimos datos, la banca española tiene una deuda neta con la institución monetaria que preside Mario Draghi de 287.813 millones de euros, cuatro veces el saldo de hace año y medio.

Fuentes diplomáticas han asegurado hoy que «si hay urgencia y voluntad» políticas se puede firmar el memorando de entendimiento «en cuestión de días», quizás incluso en el almuerzo de los líderes de la eurozona el último día de la cumbre europea. Fuentes comunitarias han calificado de irrealizable ese plazo.

El Gobierno español negocia ya el memorándum que firmará con sus socios del euro con las condiciones de la ayuda, pero quedan muchas incógnitas por resolver. Entre ellas, los tipos de interés que tendrá que pagar España por el préstamo, los plazos del crédito, las condicionalidades para los bancos individuales y el sector en su conjunto y los fondos de rescate que se utilizarán para no contaminar las próximas emisiones de bonos.

295.000 millones menos en activos
Los activos de la banca perderán entre 230.000 y 295.000 millones de euros de su valor, según la agencia de calificación crediticia Fitch, que cree que cada vez «resulta más necesario un plan de recapitalización a corto plazo de las entidades financieras. En su opinión, sólo Santander, BBVA Caixabank y un número reducido de entidades con escasa exposición al ladrillo tienen capacidad suficiente para generar beneficios, reservas y capital con los que poder hacer frente al deterioro de la economía española. Fitch calcula que las necesidades de capital del sistema financiero español podrían situarse entre los 50.000 y 60.000 millones en el mejor de los casos, y entre 90.000 y 100.000 millones escenario adverso.