ANÁLISIS: Un dilema sin respuesta por Shoshi Israeli

- ¿Qué ha sido lo más desesperante en esta lucha?
–La incógnita de saber si nuestro apoyo a Guilad le llegaría, si él sabe lo qué se está haciendo para liberarle en todo el mundo. Si nuestra voz tan pequeña moverá algo, si somos capaces de consolar a su madre desde la distancia. El no saber nada de él, saber que está tan cerca pero al mismo tiempo tan lejos, teniendo siempre el sentimiento que podría ser nuestro hijo que un día no vuelve a casa.

- Como madre, y al frente de su grupo de apoyo, ¿qué efecto puede tener el no saber de un hijo durante cinco años?
–Desde la creación del grupo, nuestro objetivo fue hacer llegar nuestro apoyo a Aviva, ya que creo que es inimaginable el dolor, la angustia, la desesperación, la soledad que puede sentir una madre al no tener noticias de su hijo y saber que está secuestrado por el grupo terrorista Hamas, sin tener ninguna visita de las organizaciones humanitarias internacionales.

- ¿Qué significa para Israel el regreso del soldado Shalit?
–Una alegría muy grande de un pueblo que ha luchado junto a la familia durante cinco años para su liberación. Esta alegría se ve mezclada junto a la terrible tristeza de ver que muchos terroristas que asesinaron a gente inocente y que tienen condena de cadena perpetua estarán en las calles.

- ¿Qué consecuencias tendrá su liberación para las madres y familiares que se encuentran en la misma situación que Aviva Shalit?
–La gran esperanza de que sus hijos vuelvan a casa, sanos y salvos, para volver a abrazarlos.

Shoshi Israeli
Presidenta del grupo Abrazo de Madre