Un emocionado último adiós para Katia Rocío y Cristina

MADRID- El dolor que el jueves inundó los alrededores de la boca de Metro de la Alameda de Osuna por la muerte de Rocío, Cristina y Katia se trasladó ayer a los cementerios en los que las tres jóvenes recibieron el último adiós de sus familias.

El cuerpo de Cristina Arce fue incinerado a primera hora de la tarde en el cementerio de la Almudena de Madrid, en una ceremonia a la que acudieron más de un centenar de allegados. Tras serle practicada la autopsia el jueves en el Instituto Anatómico Forense, el cuerpo había sido velado en el tanatorio de la M-30, desde donde fue trasladado al cementerio de la Almudena. Ya en el interior del camposanto tuvo lugar la ceremonia íntima, a la que asistieron familiares y amigos, que estaban visiblemente afectados y en donde no se permitió la entrada a la Prensa. Por su parte, el cuerpo de Rocío Oña fue incinerado por la tarde en el Tanatorio La Paz de Alcobendas, después de que se practicase la autopsia en la mañana de ayer. Rocío y Cristina eran amigas, desde que se conocieron durante su etapa en el Instituto de la Alameda.

También en el Tanatorio La Paz fue incinerada la tercera fallecida, Katia Esteban Casielles, tras ser velada por su familia en Daganzo, localidad madrileña en la que residía junto a su padre y su hermana. El drama por la pérdida de Katia se une al que la familia vivió apenas hace un año, cuando su madre perdía la vida a consecuencia de un cáncer.

A través de internet, los amigos de las tres jóvenes continuaron expresando el dolor que la tragedia les ha causado. «Descansad en paz princesas», subrayaba Andrea. «Hoy se han ido tres vidas llenas de vida. Descansen en paz», subrayaba Roberto. Muchos de los allegados también continúan mostrando su indignación con las medidas de seguridad puestas en marcha por la empresa responsable del acto. Algunos de los amigos que también acudieron seguían sosteniendo ayer que el exceso de gente está en el origen del desastre. La impresión generalizada entre muchos de ellos es la misma: «Es injusto. Deben pagar por ello».