Grupos

ANÁLISIS: Por qué tiene éxito este itinerario de fe por Ángel Barahona

La Razón
La RazónLa Razón

¿Por qué crece el Camino Neocatecumenal?
–Porque consigue llegar al corazón de muchas personas, y es comprensible también por gente sencilla. Es además un antídoto contra el individualismo tan extendido en nuestras sociedades. Da un contexto que arropa, un entorno afectivo. El rostro del otro en la comunidad ya no es anónimo, lo conoces por su nombre, es importante. El Camino busca crear, dice, «familias como la de Nazaret, con sencillez, humildad y alabanza». Otro factor es que sus iniciadores se han tomado en serio el Evangelio, con una praxis radical, que invita a vivir con disponibilidad a ser misioneros, a tener hijos, servir a la Iglesia, etc...

¿Cuál es su pedagogía?
–Las catequesis del Camino enseñan a redescubrir el bautismo en el día a día. Explica y desarrolla los pasos que se dan en las promesas bautismales: Jesús, la Iglesia, el Espíritu, la evangelización... todo lo que se nos da con el bautismo.

¿Qué atrae a los jóvenes? ¿Las danzas, la música, los iconos?
–Los jóvenes necocatecumenales no están en el mismo grupo que sus padres: les atrae celebrar con su propio grupo, sus presbíteros, en una liturgia muy cercana y relación continua con el catequista. Todo ello les toca existencialmente y desarrollan una sensación de comunidad e intimidad. Cada nuevo canto (siempre con texto bíblico) o cada nuevo icono, se presenta a las comunidades con detalle, como una catequesis, nada se hace por puro esteticismo.

¿Qué pasará dentro de 50 años, sin sus iniciadores?
–Quedará el legado de sus catequesis orales, aprobadas por Juan Pablo II, y sus celebraciones, aprobadas por Benedicto XVI. Será lo que la Iglesia quiera: el Camino es obediente.

 

Ángel Barahona
Dir. Humanidades Univ. Fco. de Vitoria