La Junta inicia la oposición a Zoido con el PGOU

 Las intenciones del Ayuntamiento de modificar «de manera puntual» el PGOU, para permitir la llegada de nuevas inversiones que generen empleos, se han topado con la primera negativa de la Junta de Andalucía. En concreto, esta alteración parcial sería para la instalación de la segunda tienda de la multinacional Ikea en la provincia, que se edificaría en los terrenos de San Nicolás Oeste frente al aeropuerto. Una operación con la que se espera que lleguen 300 millones de euros de inversión y 4.000 nuevos empleos.

Dejando a un lado las reticencias y críticas que ha recibido por los grupos de la oposición municipal, que ya han calificado la operación de «pelotazo», el alcalde, Juan Ignacio Zoido, recibió ayer el primer revés por parte de la Administración regional. Un «no» que según afirmó con anterioridad «no quería ni pensar» que se produjera y que «ningún sevillano entendería».

El propio presidente de la Junta, José Antonio Griñán, fue el que manifestó su férrea posición ante el discurso de modificar el PGOU de 2006 para lograr la llegada de empresas a la ciudad, puesto que no se pueden «derogar normativas» simplemente por decir que se crean puestos de trabajos. A su juicio, hay que analizar si este cambio en la estrategia urbanística posibilitaría un precedente o afecta a otros elementos que no son positivos.

En este sentido, aseguró que «el discurso de que modificaré todo lo que sea necesario del PGOU para crear empleo no lo comparto porque no solamente la creación de empleo legitima el deterioro de la calidad de la convivencia ciudadana», dijo en un encuentro organizado por «El Correo de Andalucía».

Mientras, desde el Ayuntamiento se sigue apostando por la modificación de la norma como instrumento indispensable para lograr la creación de empleo. Una meta que la nueva Corporación Municipal ha colocado como primer objetivo de su mandato.

El delegado de Economía, Empleo, Turismo y Fiestas Mayores, Gregorio Serrano, manifestó que el «PGOU no es un dogma de fe» y que se «trata de un documento que está al servicio de los ciudadanos y no al revés». Serrano quiso destacar que la ciudadanía no entiende el debate entre los distintos partidos cuando hay una grave situación de desempleo en Sevilla. Se preguntó qué dirían los parados que leen en la prensa cada día «lo que dice uno u otro» en lugar de buscar soluciones para generar trabajo. Sobre todo, teniendo en cuenta que el planteamiento urbanístico se aprobó en una «época que no tiene nada que ver con la actual». De todas formas, señaló que la intención es analizar el «plan y si no es posible no se hará», por lo que adelantó que se informará a la multinacional nórdica en ese caso, aunque matizó que los cambios están «dentro de la legalidad».