Fitch

Tras el tijeretazo más paro y menos solvencia internacional

Un día después de la aprobación del decretazo, la agencia de calificación Fitch rebaja un escalón la nota de la deuda española. El Gobierno admite que habrá más paro y menos crecimiento, pero amplía el plazo para negociar la urgente reforma laboral

Foto: ALBERTO R. ROLDÁN
Foto: ALBERTO R. ROLDÁNlarazon

El plan de austeridad que el Gobierno logró sacar adelante el pasado jueves en el Congreso de los Diputados por un solo voto de diferencia no ha impedido que la agencia de calificación Fitch Ratings rebajara ayer la calidad de la deuda española. La nota de Fitch de la solvencia a largo plazo española ha pasado de ‘AAA' (sobresaliente) a ‘AA+', notable alto, mientras que la perspectiva sobre futuros cambios se queda en estable. La calificación de esta compañía sigue siendo superior a la de Standard & Poor's, que la bajó a ‘AA' desde ‘AA+'. La agencia cree que el ajuste económico de España será «difícil y prolongado» y tendrá consecuencias económicas a medio plazo. De hecho el plan de austeridad ha llevado al Ejecutivo a empeorar las previsiones macroeconómicas para los próximos tres años según aprobó ayer en Consejo de Ministros. Así pues las medidas de ajuste para reducir el gasto público en 15.000 millones de euros en dos años elevarán la tasa de paro al 19,4% en 2010, cuatro décimas más de lo previsto inicialmente por el Gobierno el pasado enero, mientras que el año que viene se situará en el 18,9%, cinco décimas más. Según señaló la vicepresi-denta económica, Elena Salgado, la reducción de las inversiones en 2.125 millones de euros en 2010 explicaría la subida del desempleo. En 2012 y 2013, la tasa de paro se situará en el 17,5% y 16,2% respectivamente, media décima más y siete más respectivamente respecto a las previsiones inciales.No sólo empeora el paro, también las previsiones de crecimiento económico para el próximo trienio. Así la reducción de los salarios públicos y la congelación de las pensiones, entre otras medidas de ajuste, han llevado al Gobierno a rebajar las previsiones de crecimiento para 2011 en cinco décimas hasta el 1,3%, y en cuatro décimas en 2012 y 2013, hasta el 2,5% y 2,7% respectivamente. Peores son las perspectivas de la agencia Fitch, que cree que la recuperación económica de España «será más moderada» de lo previsto por el Gobierno. La agencia prevé que el PIB se contraerá este año un 0,5% y crecerá cinco décimas en 2011. De cara a 2012 y 2013, pevé un crecimiento del 1,7% y 1,9% respectivamente. Como consecuencia de todo esto, la agencia estima que la deuda pública alcanzará el 70% del PIB a finales de 2011 y el 78% en 2013, en comparación con la cifra inferior al 40% registrada antes de la crisis financiera de 2007. Esta previsión contrasta con la del Gobierno,que considera que alcanzará el 74% y que, a partir de 2012, comenzará a descender. Pero el Gobierno sigue con su campaña para convencer a los ciudadanos de que las medidas de ajuste han sido necesarias «para garantizar la estabilidad económica». Las duras críticas que recibió el presidente del Gobierno el pasado jueves en el Congeso por parte de todos los grupos parlamentarios llevaron ayer a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de La Vega, a señalar que luchar contra la crisis requiere de medidas «aunque a veces sean dolorosas». Criticando al PP, la vicepresidenta apostilló que «no es tiempo de pensar en clave electoral sino de asumir responsabilidades». Estas medidas de ajuste o tijeretazo, como ya se las conoce, han llevado al Gobierno a plantear una reducción progresiva del déficit de las administraciones públicas en los próximos tres años, hasta cumplir en 2013 con los compromisos adquiridos con la Comisión Europea, de no superar el límite del 3% del déficit público. Así, en 2010, se estima que el déficit del conjunto de las administraciones públicas sea del 9,3%, del 6% en 2011, del 4,4% en 2012 y del 3% en 2013, según las previsiones aprobadas ayer por el Gobierno.