Valcárcel pide la integración dentro de las ciudades de los entornos naturales

MURCIA- El presidente de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia y vicepresidente primero del Comité de las Regiones (CdR), Ramón Luis Valcárcel, defendió ayer en Copenhague la huerta murciana como un ejemplo de integración de cultura y paisaje en un entorno metropolitano. Durante la Cumbre de Regiones y Ciudades, Valcárcel intervino en el debate «La ciudad y su entorno: las sinergias entre ciudades, pueblos y regiones y áreas rurales», junto con el arquitecto español y presidente de la Fundación Metrópolis, Alfonso Vegara, el alcalde de la ciudad alemana de Stuttgart, Wolfgang Shuster, y el presidente de la región de Toscana, en Italia, Enrico Rossi.

Valcárcel realizó una aproximación a lo que considera debe ser un modelo de ciudad en Europa, sobre una propuesta coherente con las políticas actuales de la Unión Europea, y donde, según indicó, «es muy importante realizar un tratamiento específico de los entornos urbanos con valores rurales y naturales sometidos a la presión de grandes aglomeraciones urbanas, como es el caso del área metropolitana de Murcia».

El jefe del Ejecutivo murciano explicó en este importante foro que la huerta de Murcia destaca en el Mediterráneo como uno de los ejemplos más notables de un espacio de regadío, y que consiguen un sistema de gran sostenibilidad. «La huerta de Murcia es una fuente de riqueza económica, pero también una cultura», indicó. De igual forma, el presidente Valcárcel abogó por la necesidad de conseguir el denominado modelo de «ciudad compacta», que se acerca más a los objetivos perseguidos por las políticas europeas actuales y, en particular, a la Estrategia Europea 2020. La «ciudad compacta» tiende a disminuir las necesidades de transporte, favoreciendo la reducción del consumo energético. El número de viajes a pie se incrementa y se reduce el tráfico motorizado.

En esta tipología de ciudad, afirmó, «la mejora en la calidad de los espacios públicos urbanos favorece la aparición de tejidos económicos innovadores y competitivos y una vida social más cohesionada e intensa, que propicia también la inclusión social». Además, subrayó que «no podemos olvidar la singularidad del lugar, ya que las zonas urbanas más deprimidas o las periferias urbanas, como áreas frágiles y complejas, son también ricas en sugerencias, y de su indefinición puede nacer su capacidad de innovar y de transformar su entorno y, por tanto, la ciudad».

El modelo de «ciudad compacta», destacó el presidente murciano, puede constituir un instrumento adecuado a las presentes estrategias europeas en su lucha contra la crisis económica. Según Valcárcel, en el análisis del entorno metropolitano de Murcia, «se ha encontrado un recurso, la huerta, que es a la vez medio de producción agrícola y paisaje», y añadió que el Gobierno regional planteará, para el área metropolitana de Murcia, «propuestas que consideren a su huerta como un actor con un papel propio, capaz de definir, al igual que lo urbano, los límites entre la ciudad y el campo». Valcárcel expuso también el trabajo que se está haciendo en este campo en la Región de Murcia con el proyecto europeo Naturba.

Medio natural y urbano no tienen por qué estar reñidos
Junto a diversas regiones y ciudades de Francia, Portugal y España, la Región de Murcia participa en la actualidad en el proyecto Naturba que propone trabajos y actuaciones de forma conjunta en la ciudad y el campo que tienen como objetivo reflexionar sobre mantener una horticultura de proximidad, que garantice la alimentación de las aglomeraciones con calidad y seguridad. La iniciativa propone, de igual manera, la protección del ecosistema de las aglomeraciones y el mantenimiento de la biodiversidad de los entornos urbanos mediante continuidades entre las áreas naturales, todo ello con el propósito de integrar la naturaleza dentro del paisaje urbano de las metrópolis.