«Contador vuelve a empezar»

Preguntado por si el aceptar la descalificación podría ser interpretado como una admisión de la culpa, el director deportivo del Astana responde: «Quiero aclarar, para evitar malentendidos, que yo creo a Alberto. Está limpio y sabiendo todo el trabajo que hicimos para conquistar el Tour de Francia se puede imaginar lo mucho que me cuesta perderle».

Sin embargo, precisa Martinelli, «hay veces en las que uno debe elegir. O golpeas contra un muro o bien encuentras el coraje para volver a empezar».

«Alberto debe de hacer sólo lo que le dicte su cabeza, sin dejarse condicionar por las muchas personas que le rodean y no cometer el mismo error que Marco Pantani en 1999», subraya Martinelli.

Sobre Pantani, recuerda que «tras ser excluido del Giro en Madonna di Campiglio, Pantani debería haberse presentado al Tour». «Yo no logré convencerle. Con la experiencia de estos 11 años estoy seguro de que ahora lo haría», comenta Martinelli, quien agrega: «Volviendo a Alberto Contador, estoy seguro de que no ha hecho nada ilícito; pero en las condiciones en las que se encuentra no es fácil demostrarlo».

Martinelli hace hincapié además en que el año de sanción concluiría a finales de agosto y comenta: «No falta tanto».

Cada vez son más las voces del ciclismo que intentan convencer a Contador para que asuma la sanción de un año que le ha propuesto la Federción Española. El corredor no termina de aceptarlo, parte de que es inocente y que disponerse a cumplir el castigo es tanto como admitir que se dopó. La próxima semana, entre el 8 y el 10, a la vista del expediente que le ha remitido la FEC, decidirá si recurre al TAS o se dispone para el castigo; si bien la última palabra no será la suya ni siquiera en el caso de que se «declare» culpable. La Agencia Mundial Antidopaje y la Unión Ciclista Internacional podrían recurrir precisamente al TAS para exigir la pena máxima, dos años.

Como Martinelli, quien aunque tarde ha salido en defensa de Contador, se expresó el también ganador del Tour, Óscar Pereiro, éste en 2006, el pasado martes durante la presentación del equipo Movistar. «El tema de Contador es complicado. Las cosas se hacen mal desde hace mucho tiempo. No lo entiende nadie, hay cosas muy raras. Eres o no eres culpable, no a medias. Me dicen que es inocente, pero no se puede demostrar. Será un caso más de un corredor al que sancionan de manera injusta», señaló el mosense, en clara sintonía con el pinteño, quien tras conocer la sanción de un año impuesta por la Federación Española de Ciclismo, y los argumentos que le llegan desde la UCI, sentenció que no cree en los contrales antidopaje.

Todo apunta a que Contador recurrirá la sanción de un año, ésa es su intención y así lo ha declarado. Y lo hará porque quiere demostrar su inocencia y no desea ser desposeído de la victoria en el Tour 2010, su tercer triunfo en la ronda francesa. Tampoco podría correr la próxima edición. Piensa apelar ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS), con el riesgo añadido –y él no lo ignora– de que el castigo podría ser más amplio y le apliquen la máxima sentencia, los temidos dos años.