Del «arte» del secuestro al secuestro del arte por Gema PAJARES

Hace una semana nos hacíamos una pregunta: ¿es arte el secuestro de Ortega Lara? Habíamos conocido que un creador joven que apenas rebasa los treinta, Omar Jerez, quería recrear el secuestro y el calvario terrible que padeció el funcionario de prisiones. Él estuvo secuestrado 532 días, la «performance» recrearía ocho de ellos. Las distancias entre ambos hechos son insalvables. Ayer, la galería valenciana La Mutante, donde iba a celebrarse la acción, amaneció con una pintada en su fachada. Dos palabras definitivas: «Gora ETA». No hace falta firma. Omar Jerez, el artista de poco más de treinta años, se replantea seguir adelante con su proyecto: «Si querían asustarme, lo han conseguido», dice. Ha recibido durante tres días seguidos llamadas de un número oculto: «Me las hacen de madrugada. No dicen nada y cuelgan». Una «performance» sobre un tema tan delicado como el secuestro de Ortega Lara iba a generar todo tipo de reacciones. Jerez lo sabía; el comisario, también. Y el galerista. Pero ninguno esperaba ese par de palabras amenazantes. No saben si será un aviso. Por si acaso, van a pensar y a repensar. Aquel horror fueron más de quinientos días. Yhubo demasiado dolor. Yuna imagen tan feliz como doliente, la de un hombre tambaleándose, demacrado, con barba rala, liberado al fin. Una imagen con la que resulta muy difícil hacer arte.