Mil inmigrantes esperan para «asaltar» Melilla

MADRID-El problema que plantean los inmigrantes subsaharianos que pretenden entrar por la fuerza en Melilla (ayer lo consiguieron unos 200, tras saltar la valla, que ahora tiene menos protección) puede crecer en los próximos días, según fuentes conocedoras del asunto consultadas por LA RAZON. Entre 800 y 1.000 esperan para dar el salto desde Marruecos.

Los incidentes coinciden con la celebración en la Ciudad Autónoma de unas jornadas, organizadas por una asociación favorable a la entrada libre de los inmigrantes, lo que no debe ser conocido por los que esperan para los asaltos. No se descarta, según las citadas fuentes, que los que han sobrepasasado la valla hayan contado con algún tipo de ayuda desde el interior de Melilla.

De hecho, la Delegación del Gobierno tachó la entrada masiva de ayer de «invasión» «en una avalancha coordinada y al unísono». El asalto se produjo a las 14.40 de la tarde, por la zona del cauce del río de Oro.

Durante los incidentes, dos agentes de la Guardia Civil, de los que vigilan el perímetro fronterizo, resultaron heridos, uno de ellos con un esguince en la rodilla y, el otro, con contusión en la mano izquierda, según Ep. Entre los asaltantes no se produjeron lesiones de importancia, que se sepa. La citada Delegación enfatizó que la entrada de los inmigrantes, que se distribuyeron por barrios de la ciudad, provocó la alarma de los vecinos ante las carreras de los que habían saltado la valla, que «se enfrentaban en actitud prepotente y agresiva a las Fuerzas de Seguridad», algo impensable en otros tiempos.

Daños en el vallado
Como consecuencia de los incidentes, unos 40 metros del vallado resultaron dañados al quedar materialmente aplastadas las instalaciones, que ayer ya se estaban reparando.
 La Delegación del Gobierno, según admitió su portavoz a Ep, es consciente de la desesperación de los inmigrantes arraigados en el entorno marroquí que circunda a Melilla. No obstante, añadió que «considera intolerable el asalto masivo sobre nuestra frontera que vienen protagonizando de forma recurrente». Además, recordó que «es necesario reflexionar sobre este tipo de inmigración irregular que ha transformado la entrada pacífica en nuestro territorio en una abierta demostración de fuerza».

 La Delegación del Gobierno denunció el papel que juegan «las mafias que embaucan y engañan a los inmigrantes, hasta llevarlos a la situación límite que deriva en los episodios que estamos viviendo». Por ello, subrayó que, una vez más, «no nos enfrentamos a un problema que afecte en exclusiva a Melilla, a la vecina provincia marroquí de Nador, a España o Marruecos, sino a la Unión Europea».