Administración Pública

La Junta no habla de empleo: «No podemos prometer trabajo y felicidad»

El presidente del PP-A mostró un gráfico sobre la evolución del desempleo en la región
El presidente del PP-A mostró un gráfico sobre la evolución del desempleo en la regiónlarazon

Sevilla- El empleo monopolizó el debate final del Presupuesto de la Junta de Andalucía para 2012. El presidente del PP-A, Javier Arenas, centró su intervención en esta materia, algo que no gustó a la consejera de Hacienda Carmen Martínez Aguayo, que calificó de «indigno e impropio» que se hablara del 1,2 millones de desempleados porque los gobernantes «no podemos prometer trabajo y felicidad».

El Presupuesto andaluz para 2012 no contempla por primera vez estimaciones de empleo para el próximo año. «Un Gobierno que no habla de empleo no merece ser Gobierno», aseguró Arenas en su primera intervención. Martínez Aguayo ha justificado esta ausencia para que no se manipulen los datos aunque ha admitido que el aumento será «casi testimonial o muy mínimo».

El líder popular recordó las promesas de pleno empleo de Zapatero o Chaves o incluso se remontó a las primeras elecciones democráticas cuando el PSOE decía que «un millón de parados es terrorismo».

Para el PP, las cuentas públicas son un «eslogan electoral» y responden a un «fin de ciclo». Una de las prioridades ha sido el mantenimiento «del gran monstruo burocrático creado en los últimos 30 años». Citó la ley de reordenación del sector público que ha permitido el mantenimiento de los puestos de trabajo de los laborales de las empresas públicas –contratados «a dedo»– en las nuevas agencias. «Antes de la ley nos costaban 2.300 millones de euros y ahora 3.300», dijo.

En esta misma línea, apuntó que hay 1.430 millones de euros en avales para las empresas públicas, cantidad, por ejemplo, que se reduce a los 30 millones para los ayuntamientos.
Arenas repasó los recortes en algunos programas de sanidad, educación e igualdad y recordó que una cosa es lo que figura en el Presupuesto y otra muy distinta lo que se ejecuta –3.600 este año en sanidad o 388 en políticas sociales–.

Arenas también desgranó su alternativa. «No haremos unos presupuestos falsos, serán realistas y generarán confianza en los ciudadanos y en los emprendedores», afirmó.

Entre sus propuestas, apostó por poner la fiscalidad al servicio de las familias y el empleo; que la educación figure como prioridad; un plan de racionalización del gasto corriente «empezando por los partidos políticos»; el fortalecimiento de sectores estratégicos como el turismo o la agroindustria; centrales de compras en la administración; un plan de pago a proveedores; o una auditoría de todas las políticas de empleo.

Los escándalos de la Consejería de Empleo también aparecieron en el debate. Arenas buscó varias veces a Griñán en sus dos alocuciones. Le pidió que se responsabilizar a de las cifras del desempleo igual que lo ha hecho Zapatero. «Si no lo ha hecho con el asunto de los ERE no cabe esperarlo, pese a que ha sido el responsable de los presupuestos de los ocho últimos ocho años, como presidente o vicepresidente económico», le recordó el presidente de los populares andaluces. A Aguayo –que acusó a Arenas de ser el político mejor pagado de Andalucía– también le recordó que en una comparecencia pública dijo que no se leyó los informes de la Intervención en los que se advertía del procedimiento irregular. «Ojalá o hubiera hecho», exclamó.

EL PSOE rechazó la enmienda totalidad de PP e IU y el Presupuesto seguirá ahora su trámite parlamentario.

 

Griñán intervino... pero desde su escaño
Fiel a su costumbre, el presidente de la Junta no defendió el Presupuesto de su Gobierno y dejó la tarea a la consejera de Hacienda, pese a las reiteradas peticiones de Arenas. El líder del Ejecutivo andaluz sí se mostró más activo que otras ocasiones y desde su escaño, próximo a la tribuna, entró en diálogo en varias ocasiones con el presidente del PP-A. «Hubiera estado mejor aquí arriba», le dijo Arenas al final.