Bien España por Nacho Villa

Hace unos días, desde esta misma esquina, en un momento en el que el medallero dejaba a España con muy malos resultados, me permitía romper una lanza a favor del deporte español. No podíamos medir el gran momento del deporte español simplemente por el medallero. Ni todo es tan blanco, ni todo es tan negro. Pues bien, pocos días después y a la luz del medallero, podemos decir rotundamente: ¡bien, España!
España ha reaccionado, lo ha hecho con coraje y con bravura, lo ha hecho dando auténticas lecciones de maestría, lo ha hecho a pesar de los agoreros y de los que decían que estábamos en el comienzo del hundimiento del deporte español. Pues bien, nada de esto se ha producido. Es más, hay que aplaudir, y con fuerza, la lección que han dado las deportistas españolas. Londres ha significado la puerta grande para el deporte femenino español, en el terreno individual y también por equipos. Han sacado las castañas del fuego cuando el medallero estaba muy lánguido. Esos datos, esos números, esas medallas marcan un paso adelante positivo e histórico que ya no tiene marcha atrás.
Londres, en definitiva, nos confirma como una referencia olímpica que comenzó en Barcelona' 92, que tuvo un pequeño bache en Sydney, pero que desde entonces se ha mantenido en la misma línea en Atenas, Pekín y ahora en la capital británica.
Londres ha terminado, lo ha hecho muy bien para España. Ahora hay que pensar en Río de Janeiro. No hay que contentarse con lo que tenemos. Hay que ir a más.