ANÁLISIS: Qué implica la irrupción del islamismo por Pierre Rousselin

l ¿Qué consecuencias puede acarrear el vínculo del terrorista de Toulouse con Al Qaeda?
–Existían dos hipótesis: la posibilidad de que fuera un terrorista de extrema derecha, como el noruego Anders Breivik, o de que se tratase de un terrorista islamista. El hecho de que se haya confirmado la relación de este individuo criminal con Al Qaeda cambia completamente el impacto de los atentados en la política francesa. Quienes se precipitaron en atribuir el ataque antisemita a una supuesta radicalización del discurso de derechas en Francia deberán rectificar. El candidato François Bayrou cometió un gravísimo error al acusar a Sarkozy de alimentar con su discurso duro con la inmigración las acciones criminales de los radicales, y probablemente sufra un castigo por parte de la opinión pública, porque se ha demostrado que se equivocó.

l ¿Cómo ha encajado la sociedad el primer golpe del terrorismo islámico desde los 90?
–El terrorismo islámico siempre ha sido una amenaza para Francia. Si no han actuado en este tiempo ha sido gracias al trabajo de las Fuerzas de Seguridad y de los Servicios de Inteligencia, que han conseguido anticiparse. La sociedad y la clase política están unidas en su rechazo contra Al Qaeda. En cambio, si se hubiera tratado de un ultranacionalista como Breivik, hubiéramos asistido a un agrio enfrentamiento entre la clase política francesa entre sí y la sociedad, por ende.

l Los tres atentados que empezaron el 11 de marzo se han producido cuando falta prácticamente un mes para las elecciones presidenciales francesas. ¿Pretendía el terrorista influir en los electores, como ocurrió en España en 2004?
–No se puede descartar esta vinculación, pero todavía se desconoce si el terrorista actuó en solitario o en compañía. Tampoco se conocen las motivaciones que le llevaron a preparar los ataques y si eligió este periodo electoral porque quería dar más trascendencia y relieve a sus acciones.

l ¿Sarkozy saldrá fortalecido?
–Es lógico que en una situación de crisis salga beneficiado el presidente, sea quien sea. A Sarkozy no se le puede achacar ningún error en la gestión de los atentados. Habrá que esperar a ver qué puntos le dan las encuestas.

Pierre Rousselin
Director adjunto de «Le Figaro»