Extremadura

Muere un instructor de vuelo al estrellarse un F-5

El aparato cayó sobre la base de Talavera al fallar un motor

Investigadores militares, ayer, estudian los restos del F-5
Investigadores militares, ayer, estudian los restos del F-5larazon

MADRID- El aeropuerto civil de Talavera la Real verá restringidas sus operaciones mientras la Comisión de Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares termina de investigar las causas y los detalles del accidente aéreo en el que ayer murió un comandante instructor de la base de Talavera la Real y resultó herido un alférez alumno. También la Policía Judicial y el juez forense han emprendido sendas investigaciones para analizar las causas del siniestro y que se pueda abrir «lo antes posible» la pista a los vuelos civiles.

Los técnicos tratan de determinar por qué falló el motor izquierdo del F-5M y por qué se estrelló el avión cuando estaba en la maniobra de aproximación a la pista de la base militar. El delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, negó ayer que haya preocupación por los cuatro accidentes de F-5 que se han registrado en la región en los últimos 12 años. López consideró que estos incidentes son «excepcionales», aunque admitió que cuando se producen «son muy espectaculares» y la población «los toma muy en cuenta».

En 2003 se produjeron dos accidentes de aviones F-5 en la comunidad autónoma extremeña y en 2006, otro –en Burguillos del Cerro (Badajoz)–, a los que se suma el que ha tenido lugar hoy. Hasta la base se desplazaron el presidente del Gobierno extremeño, José Antonio Monago, y el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, mientras que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, envió un telegrama a la viuda del comandante fallecido para transmitirle su «más sincero pésame por esta dolorosa pérdida».

Misión rutinaria
El accidente se produjo poco después de que el caza –un F-5M fabricado y modernizado en 2005 en España bajo licencia norteamericana– despegase en una misión rutinaria de entrenamiento con el comandante Ángel Álvarez Raigada, natural de la localidad zamorana de Coreses, casado y padre de dos hijos, y el alférez Sergio Santamaría de Felipe, de 23 años y originario de Salamanca, a bordo. El avión, que quedó completamente destrozado, se precipitó contra la cabecera de la pista de la base aérea a las 09.47 horas de ayer, cuando los pilotos trataban de realizar un aterrizaje de emergencia tras detectar que el motor izquierdo se había parado.

Según informaron a Efe fuentes del Ministerio de Defensa, el F-5 tiene asientos eyectables y se está investigando si a los ocupantes del aparato les dio tiempo a activarlos. Este tipo de avión, cuyos primeros modelos entraron en servicio hace más de 40 años, está considerado por el Ejército del Aire como el idóneo para las necesidades de la escuela de reactores de Talavera la Real, ya que representa la mejor preparación para el pilotaje de los complejos cazas de nueva generación. Además, según Defensa, ha sido el avión con la más alta relación disponibilidad-costo de cuantos han pasado por la aviación española. De hecho, durante los años 80 y 90 la Fuerza Aérea de EE UU llegó a utilizar los F-5 en sus escuadrones de «agressors», cuya misión era entrenar a los cazas estadounidenses de última generación para posibles combates con aviones rusos por su similitud con el Mig-21.