Francia

Eguiguren obliga a López a desdecirle

El presidente del PSE, Jesús Eguiguren, que se declara enemigo de la polémica, se superó a sí mismo al volver a provocarla ayer. Hasta tal punto, que sus declaraciones sobre la lucha antiterrorista obligaron al poco tiempo al Gobierno vasco a emitir un comunicado, desde presidencia, desmarcándose de todas sus consideraciones.

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 Eguiguren, en una entrevista en Euskadi Irratia, señaló que el Ejecutivo de López está para lograr «la paz» y advirtió de que si el PP «no nos deja hacer lo que debemos hacer, deberíamos romper con él». Una reflexión que el lendakari desmintió al defender que es precisamente la política antiterrorista del Gobierno vasco, que apoya el PP, la que está llevando a la organización terrorista a su «máxima debilidad», y que ha de ser persevada hasta conseguir la paz y la libertad entendidas como «la desaparición de ETA y el fin de toda amenaza sin compensación política alguna».

Un objetivo, añade el comunicado, esencial e irrenunciable para PSE y PP y que se mantiene por encima de «divergencias puntuales que no afectan al acuerdo» entre ambos. El propio consejero de Interior, Rodolfo Ares, reforzó esta rectificación al asegurar que el PP está respaldadndo la política de pacificación del Gobierno vasco «que nos ha traído hasta aquí». Pero Eguiguren aún lanzó un aviso más al socio preferente de López y vaticinó que será «difícil» que su acuerdo de gobernabilidad con los de Basagoiti se extienda a otras instituciones tras el 22-M «porque el PP está en pocos sitios y no nos necesitan, como nosotros no les necesitamos en la mayoría de los sitios».

De nuevo, el Gobierno vasco le enmendó la plana y dejó claro que la política de alianzas postelectorales la determinará el PSE tras los resultados y en función de la posibilidad «de establecer gobiernos progresistas». El comunicado de desmarque es taxativo e indica que el presidente vasco y el Gobierno autonómico «no comparten las opiniones manifestadas» por Eguiguren, tampoco la referida al tiroteo de ETA en Francia que hirió a un gendarme. «Un acto terrorista muy grave e inaceptable», sobre el que Eguiguren manifestó que no supone una reorganización de la banda armada. «Hay otra explicación», señaló.

Ésta: «Mientras una organización existe, tiene que comer, tiene que andar. Una tregua no significa que entran en un agujero y que están quietos. No sé hasta dónde se pueden sacar conclusiones sobre lo ocurrido». Y aún añadió sobre el arsenal que custiodaba el «comando Erreka» que «cuando llegan a sus últimos años, incluso este tipo de organizaciones ayudan a que aparezca este tipo de material».