Navarra

ETA como «aliada»

La Razón
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La falsedad de los amagos de la peña de Batasuna de «convertirse» a la democracia es tan obvia como lo sería la insinceridad de los deseos del lobo de Caperucita de volverse vegetariano. Y todos los indicios o las pruebas que desvelen la naturaleza filibustera de su estrategia para colarse en las próximas municipales son bienvenidos. Pero nuestra atención debe fijarse con mucha prudencia en los socialistas, que parecen dispuestos a desconcertarnos sobre sus intenciones con respecto a esta cuestión. El mismo fin de semana pasado en el que Patxi López y el portavoz del PSE-EE José Antonio Pastor nos inquietaban expresando su sueño de que «la izquierda abertzale sea legalizada», teníamos noticia de que Rubalcaba había convocado para el martes una reunión con representantes del Ministerio Fiscal, la Abogacía General del Estado, el CNI y los mandos de la lucha antiterrorista para hacer frente a los planes de Batasuna de colarse en los comicios del 22 de mayo.
Y era también el martes el día en el que se producían las detenciones en Navarra contra el «aparato político» de ETA. Esto quiere decir que, afortunadamente, «no está todo el bacalao vendido», como pretenden los agoreros de la negociación. En realidad, el mejor aliado que tenemos contra su legalización es la propia ETA, que no se va a conformar con una marca blanca. Lo quiere todo. Para humillar a la democracia.