Fracasan las negociaciones para formar Gobierno en Bélgica

Aunque el monarca Alberto II de Bélgica mantendrá consultas antes de decidir si acepta o no la dimisión de Di Rupo, el líder socialista ha dado por hecho en rueda de prensa que será "liberado del cargo", después de que su última propuesta de acuerdo fuera rechazada en la mañana del viernes.

Sin embargo, Di Rupo no ha cerrado la puerta a continuar las negociaciones, como líder de su grupo, y considera que "es posible"dar con una solución que satisfaga a los siete partidos implicados, cuatro flamencos y tres valones.

"No deseo el final de Bélgica. Por eso creo que hay que continuar con el diálogo", insistió en una rueda de prensa al poco de regresar del Palacio de Laeken, en donde entregó su dimisión al rey.

Di Rupo ha dejado claro que "la gran mayoría de los partidos"eran favorables al acuerdo y estaban dispuestos a "remodelar en profundidad"Bélgica con una solución "respetuosa"y "equilibrada"con todas las comunidades.

Además, ha señalado a "dos partidos"flamencos, en referencia a los independentistas de N-VA y los democristianos del CD&V, como los que han "bloqueado"las negociaciones en asuntos clave como el modelo de financiación de la región capital de Bruselas y la escisión del distrito electoral Bruselas-Halle-Vilvoorde.

"Hemos perdido la oportunidad de cambiar la cara de Bélgica"lamentó el líder socialista, quien reafirmó la disposición de los partidos francófonos por avanzar hacia un consenso, "pero no a cualquier precio o por un alto cargo". Tampoco aceptarán "nada que empobrezca a valones o bruselenses", advirtió.

En declaraciones a la cadena de televisión RTBF, el líder de los independentistas del N-VA, Bart de Wever, ha insistido en que "cuando hay un fracaso, todos (los que negocian) son responsables", respondiendo así a quienes señalan a su partido como principal causa del bloqueo.

"Uno no negocia durante más de dos meses para fracasar, sino para lograrlo (el acuerdo)", se defendió.

Las conversaciones para formar un Gobierno de coalición en Bélgica se extienden desde el pasado 13 de junio, cuando los independentistas flamencos de Nueva Alianza Flamenca (N-VA) se impusieron en unas elecciones anticipadas.

La joven formación del N-VA logró una victoria histórica al onvertirse en la fuerza más votada en el país, tras la caída del jecutivo liderado por el democristiano flamenco Yves Leterme, que aún ejerce de primer ministro en funciones.

Pese a la inestabilidad política, Bélgica asumió el pasado 1 de julio la presidencia de turno de la UE.