El Gobierno politiza los organismos reguladores

MADRID- El Consejo de Ministros acordó ayer, a propuesta del Ministerio de Industria, el nombramiento del secretario de Estado de Telecomunicaciones, Bernardo Lorenzo, como presidente de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) y el nombramiento de dos nuevos consejeros a propuesta del PSOE y PNV en la Comisión Nacional de la Energía (CNE).

Bernardo Lorenzo sustituirá así a Reinaldo Rodríguez, que deja el cargo tras seis años al frente del máximo regulador del sector. Lorenzo apenas cumplirá diez meses en su cargo actual, al que accedió el pasado julio en sustitución de Francisco Ros. El Gobierno coloca así al frente de la CMT a un perfil alineado con el PSOE, ignorando las insistentes peticiones de Bruselas para que España aumente la independencia de sus organismos reguladores.

El Gobierno también propuso para este organismo a dos nuevos consejeros, Marta Plana, a propuesta de CiU, y Xabier Ormaetxea Garai, a propuesta del PNV. Plana era hasta ahora consejera general legal de la empresa dedicada al marketing «on line» Aedgency, mientras que Ormaetxea, era director gerente desde 2005 de una pequeña empresa de Vizcaya dedicada a la actividad inmobiliaria.

El PP en contra
Otros cuatro consejeros de la CMT, Gloria Calvo Díaz (PP), Antoni Elías (CiU), Albert Martí Batera (PSOE) y Crisanto Plaza (PP), con los mandatos cumplidos, dejarán sus puestos. Así, este organismo regulador ya no contará con ningún consejero del Partido Popular. Es más, la renovación de este órgano se produce sin el consenso del PP, que asegura que no han sido consultados por el Ministerio de Industria y denuncian que la politización de los órganos rectores que el Gobierno inició ayer «equivale a reducir la transparencia y fiabilidad de la economía española» en los sectores estratégicos, como son Comunicaciones, Energía y Defensa de la Competencia.

El PP reclamaba que la designación de los miembros de los organismos reguladores se realizara por consenso entre el Gobierno y las fuerzas políticas, y proponía que los cargos fueran votados por el Parlamento, con mayoría de tres quintos para el presidente, y mayoría absoluta para los consejeros. El PP ve en esta remodelación la «prueba del algodón» de que el Gobierno tiene la «intención descarada» de mantener el control sobre los reguladores.

Los cambios en la CNE también cuentan con un claro perfil político. A propuesta del PNV, el Gobierno nombró como consejera a la ex vicelendakari Idoia Zenarruzabeitia y mano derecha del ex presidente del Gobierno vasco, Juan José Ibarretxe. También ha nombrado consejero, a propuesta del PSOE, a Tomás Gómez, investigador y profesor de la Universidad Pontificia de Comillas, especializado en temas energéticos.

Tanto el nuevo presidente de la CMT como el resto de los consejeros designados ayer deberán comparecer ahora ante el Congreso de los Diputados, como obliga la Ley de Economía Sostenible. Su nombramiento tendrá que ser aprobado por mayoría cualificada del Parlamento, lo que se espera que suceda sin problemas por el pacto establecido entre el PSOE y los nacionalistas. Una vez conseguido el visto bueno de los diputados, el Ejecutivo emitirá el 6 de mayo el real decreto con los nuevos nombramientos. En junio acaba el mandato de la presidenta de la CNE, Maite Costa, propuesta por el PSOE y la de otros cuatro consejeros más, que son Luis Albentosa (PSOE), Jorge Fabra (PSOE), Jaime González (PSOE) y Sebastián Ruscalleda (ERC). Como sustituto de Maite Costa se baraja el nombre del secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.

A juicio del PP, el nombramiento de un responsable político del Ministerio de Economía para presidir un órgano rector «es el acabose de la falta de transparencia y de credibilidad en términos de cómo se va a regir y cómo va a funcionar un sector de la actividad económica tan importante».

Aplazado el plan contra el empleo irregular
Como había anunciado el Gobierno, el plan contra el empleo irregular no se aprobó ayer como se esperaba en un principio, por el rechazo de los sindicatos, que lo calificaron de «inviable». El vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, señaló que, aunque no se quiere
«pillar los dedos», es «altamente probable» que el próximo 29 de abril se apruebe el plan contra el empleo sumergido. Lo que no dijo es si se aprobará o no con el visto bueno de los agentes sociales. El Gobierno trabaja en un nuevo borrador porque las propuestas planteadas hasta ahora son, a juicio de los sindicatos, «desequilibradas».

Los protagonistas
Bernardo Lorenzo
El que será presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CMT), Bernardo Lorenzo, es desde julio de 2010 secretario de Estado de Telecomunicaciones y segundo de a bordo del Ministerio de Industria. Pasará a dirigir un organismo con fuertes competencias ejecutivas en el sector y capacidad sancionadora, al contrario de lo que sucede con la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
Maite Costa
La presidenta de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), Maite Costa, abandonará su cargo el próximo junio tras seis años al frente de este organismo. Costa, ex diputada socialista, fue nombrada por el ministro de Industria, José Montilla, presidenta de la CNE el 1 de junio de 2005 en sustitución de Pedro Meroño. Se baraja la posibilidad de que el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, la sustituya en el cargo.
Julio Segura
Las sociedades gestoras españolas podrán gestionar fondos domiciliados en otros Estados miembros y viceversa, tras aprobar el Consejo de Ministros de ayer la reforma de la Ley de Instituciones de Inversión Colectiva. Se refuerzan así las potestades supervisoras de la Comisión Nacional del Mercado deValores (CNMV), que preside Julio Segura.