Cádiz
Griñán ignora su compromiso y los derrotados en mayo dejan la oposición
La elaboración de las listas electorales en un partido acaba con muchos de los principios y normas que las formaciones políticas se imponen a sí mismas. Los líderes se cuidan de hacer aseveraciones que luego no pueden cumplir. Algo parecido le ha ocurrido al presidente de la Junta de Andalucía y secretario general del PSOE-A, José Antonio Griñán.
En plena elección de los candidatos socialistas a las elecciones municipales, afirmó categórico que exigía «un compromiso de ocho años». Los candidatos socialistas asumían que estarían en el Gobierno o en la oposición en función de lo que decidieran los ciudadanos. En menos de cuatro meses, esa promesa ya es historia, ya que la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Huelva y presidenta de la Diputación, Petronila Guerrero, encabezará la lista al Senado del PSOE por Huelva y, si sale elegida, dejará ambos cargos.
«El partido me pide que me vaya al Senado y me voy con gusto», aseguró Guerrero en declaraciones a Europa Press. También justificó que la labor en la Cámara alta es «muy intensa» y que entiende que debe abandonar ambos cargos.
Este último extremo es una excepción dentro del PSOE. El propio Griñán defendió la compatibilidad del puesto de alcalde con el de senador porque se trata de «una cámara de representación territorial». E incluso el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, es senador desde noviembre de 2010, cuando ya se conocía que iba a presentarse a la Alcaldía de Sevilla. Por su parte, la lista al Congreso por Huelva la encabezará Javier Barrero, que lleva en Madrid desde 1982.
Otro de los que dejará la política andaluza será el secretario provincial del PSOE de Cádiz y alcalde de Benalup, Francisco González Cabaña, que acompañará a Manuel Chaves en la lista por Cádiz. En su caso, irá al Congreso por lo que, según la normativa del PSOE, si es elegido tendrá que dejar su cargo como alcalde después de 28 años. El puesto orgánico dentro del partido será algo que tendrá que discutir más adelante.
Estos casos se suman a otros alcaldes de municipios más pequeños derrotados en las elecciones de mayo y que han sido recolocados como altos cargos de la Junta. Es el caso, por ejemplo, de los ex regidores de Zalamea, Valverde, Trigueros, Pozo Alcón o Loja.
La otra sorpresa de las listas socialistas al Congreso será la presencia de la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Rosa Aguilar, por Almería. Para evitar conflictos en Córdoba a Aguilar la sitúan en una provincia donde la agricultura adquiere especial relevancia. Por eso, el diputado nacional del PP por Almería Rafael Hernando se mostró contento. «Ya tenemos la campaña hecha», dijo. El PP le reclamará explicaciones sobre las inversiones pendientes de Acuamed, la situación de la agricultura y su defensa ante Europa ante la alerta sanitaria del pepino español. «Que pongan a quien quieran: a un comunista, a un no comunista o a un socialista de nueva creación», sentenció.
La Junta no aprueba la propuesta de transparencia del PP y sí la del PSOE
Mientras el Partido Socialista incumple su promesa de que los candidatos derrotados en mayo continuarían en la oposición, prosiguen los pasos para la aprobación de las leyes sobre transparencia democrática que, entre otras cosas, acabará con la presencia de los alcaldes del PP en el Parlamento de Andalucía. El Consejo de Gobierno acordó ayer manifestar el criterio favorable a la toma en consideración de esta Proposición de Ley presentada por el Grupo Parlamentario Socialista, un trámite necesario para su debate. En esa misma reunión, el Ejecutivo andaluz expresó su criterio desfavorable a una Proposición de Ley que el PP-A presentó sobre esta materia, pero que no incluye el veto a los alcaldes y sí, por ejemplo, facilidades para la creación de comisiones de investigación parlamentarias.
Según la consejera de Presidencia, Mar Moreno, es «razonable» que se debata la propuesta socialista y abogó por el consenso.
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