El Valencia estudia un vía para acabar el nuevo Mestalla

Valencia- En cualquier caso, el mensaje del presidente no era para tirar las campanas al vuelo ya que también dijo que «no permitirá que aumente la deuda de la entidad o que el futuro del club peligre por el hecho de finalizar las obras del nuevo estadio de Mestalla».
Explicó también que «hay, sin embargo, cosas que no dependen de nosotros y que necesitan financiación».

Las obras de Mestalla dieron comienzo en 2007 y se pararon en 2009. La inversión pendiente para finalizar el estadio ronda los 150 millones de euros.

Por lo demás, la junta de accionistas del Valencia aprobó ayer un presupuesto de 104 millones de euros para la próxima temporada, en la que espera obtener un beneficio de 4,6 millones tras haber conseguido en el ejercicio anterior un superávit de 330.000 euros.

Las cuentas del año 2010-2011 fueron aprobadas con el 99,35 por ciento de las acciones presentes en la junta y el presupuesto del ejercicio actual por un 99,18 por ciento.

El club ha logrado 333.000 euros de beneficios en el ejercicio 2010-2011 con 116 millones de ingresos, siete más de lo previsto, ya que en la previsión del año pasado no se contemplaba que el equipo superara, como así ocurrió, la fase de grupos de la Liga de Campeones, ni que Mestalla acogiera la final de la Copa del Rey, que dejó un millón de euros.

Se gastaron 3,6 millones de euros de lo previstos al contratar a los jugadores Adil Rami y Jonas Gonçalves y abonar las primas a los futbolistas por superar la fase de grupos de la Liga de Campeones. Para este ejercicio, el club prevé 104 millones de euros en el capítulo de ingresos, sin superar la actual fase de la Liga de Campeones y sin acoger la final de Copa del Rey, con un 95 por ciento de estos ingresos ya garantizados y con una previsión de 4,6 millones de euros de beneficio.

Sobre los 180 millones de euros de reducción de la deuda del club en los dos últimos años, Javier Gómez, vicepresidente del Valencia, indicó que la mitad se debe a la ampliación de capital y la otra mitad proviene de la gestión.

«Sin el problema por la venta de las parcelas de Mestalla, la deuda del Valencia sería de 140 millones de euros, con lo que cumpliríamos con los indicadores establecidos por la UEFA», indicó.
 

Polémica
No son de bankia
Sin duda, Bankia fue la protagonista ayer de la junta de accionistas del Valencia. Manuel Llorente, afirmó que los bancos no son propietarios del club sino «algo necesario para que el negocio continúe» y que el consejo de administración del Valencia «no está al servicio de Bankia».

«Tenemos la suerte de tener un banco que confía en este consejo y cada vez que salimos de una reunión con ellos, nuestra credibilidad aumenta en cantidades industriales. No estamos al servicio de Bankia sino de nuestra conciencia». Algunos accionistas propusieron que el Valencia luzca publicidad de Bankia pra reducir la deuda, que ahora, dijo Llorente, «se negocia en Madrid».