Cuba cuela a España 7 exiliados que no son presos de conciencia

La negativa de los 13 anticastristas a aceptar el exilio en España ha provocado que el régimen cubano los mantenga en prisión y haya incumplido el plazo de cuatro meses que los propios Castro establecieron con la Iglesia católica cubana para liberar a los últimos presos de la oleada represiva que sacudió la isla en 2003. De estos 75 disidentes, 22 ya habían sido excarcelados con licencia extrapenal (por motivos médicos) en los últimos años y permanecen en Cuba. A España han llegado 46 presos cubanos (39 del «grupo de los 75») y otro a Chile. De los últimos 13 disidentes, la mayoría «no acepta el destierro en España porque los liberan al pie del avión como si fueran leprosos. Es ultrajante», manifestó a este diario el opositor Elizardo Sánchez. Parte del último grupo que debería haber sido excarcelado antes del pasado lunes (cuando se cumplió el plazo de cuatro meses) exige ser liberado y permanecer en Cuba mientras el resto prefiere el exilio en EE UU.

Por contra, Cuba ha dado prioridad a la liberación de siete reos condenados no por delitos de opinión sino por hechos violentos como secuestros aéreos o marítimos y que llegaron a España el 22 de octubre y el 5 de noviembre.