Cospedal: «España no puede perder un año más»

La número dos de los populares, presidenta electa de Castilla-La Mancha tras 30 años de hegemonía socialista y que tiene intención de continuar como secretaria general del partido, ha dejado claro que el PP no se plantea ninguna "actuación formal"en el Congreso, es decir, una moción de censura.

Cospedal ha descartado por ahora esa opción a pesar de que hoy, en la conferencia de prensa que ha dado en la sede de la organización, ha insistido en que "España no puede aguantar diez meses"hasta las elecciones generales y que los españoles "no se pueden permitir perder más tiempo".

A su juicio, el bagaje que deja la victoria del PP por casi diez puntos -es la mayor ventaja de la historia en unos comicios municipales- refleja "la voluntad de cambio"en todo el país. Es algo, ha dicho, que los ciudadanos han expresado de forma "meridianamente clara".

Sin censurar de lleno la decisión de Zapatero de no convocar elecciones, Cospedal ha instado al presidente del Gobierno y a su partido, el PSOE, a que reflexionen, pues, como ha apuntado de nuevo, España no está para "perder un año más".

No obstante, la que será nueva presidenta de Castilla-La Mancha se ha remitido al veredicto que el líder del PP, Mariano Rajoy, emita en unas horas ante el Comité Ejecutivo de su organización.

También se ha remitido al presidente nacional para su permanencia como secretaria general tras haber ganado las elecciones en Castilla-La Mancha. Cospedal se ha limitado a decir hoy que ninguna decisión está tomada y que siempre ha tenido su cargo a disposición de lo que Rajoy estime.

Supuestamente, recuerdan fuentes de la dirección, el líder se habría comprometido con ella a que la mantendría en el cargo incluso aunque fuera la primera presidenta del PP en Castilla-La Mancha.

Al margen de ello, Cospedal ha puesto el énfasis en recalcar que el tiempo que emplee el PSOE para elegir a su nuevo candidato "no puede ser tiempo perdido"para España, así que ha apelado a la responsabilidad de Zapatero como jefe del Gobierno y a la sensibilidad de los socialistas.

Mientras siga en la oposición, el PP, ha explicado, apostará por reformas "de calado y de contenido"y por apoyar aquellas medidas que crean que la economía española necesita.

Además, ahora que los populares tienen más poder regional y local, la base de sus actuaciones será la austeridad, ya que ése es el primer compromiso del programa electoral y la clave, según ha señalado, para crear empleo.

Cospedal ha lanzado un guiño a los acampados en varias plazas y calles españolas, los "indignados", para indicar que el descontento social procede en gran medida de "no tener futuro"por no encontrar trabajo, y para resaltar que el PP tiene esa prioridad en cada apartado de su programa.

También ha puesto el acento en dos palabras "compromiso"y "responsabilidad"con el fin de trasladar el siguiente mensaje: el PP gobernará donde ejerza el poder pensando en los que le han votado y en los que no, especialmente en los más desfavorecidos.

No ha renunciado a la autocrítica, sobre todo por el alto índice de votos en blanco y por la victoria de un ex del PP en Asturias, Francisco Álvarez-Cascos.