Mr Adelson pone un pie en «sus» terrenos

MADRID- En la agenda de trabajo del Sheldon Adelson no estaba previsto, fue una decisión tomada a título personal y comunicada en el último momento por razones de seguridad, explicaron ayer a este periódico sus colaboradores. Sin embargo, antes de tomar la «decisión final» entre Madrid o Barcelona, el magnate estadounidense y próximo promotor de Eurovegas decidió ayer hacer una parada en la capital en su viaje desde Tel Aviv a Las Vegas.

Adelson se ha propuesto tomar una decisión antes de que termine el mes de mayo e iniciar así este mismo verano la proyección del macrocomplejo de ocio, negocios y juego en el que ha anunciado que invertirá 26.690 millones de euros.

El pasado mes de febrero, el magnate estadounidense ya realizó una escala de características muy similares en Barcelona. En este caso, Adelson estuvo poco más de dos horas en las que visitó los terrenos del Baix Llobregat (una de las zonas ofrecidas por la Generalitat para su proyecto), mantuvo una reunión con el presidente autonómico Artur Mas y con destacados empresarios y, ya en el aeropuerto, se vio con el secretario de Estado de Comercio, Jaime García–Legaz.

La «escala» en Madrid tuvo casi los mismos ingredientes. El avión privado de Adelson aterrizó en torno a las cuatro de la tarde en la T4 de Barajas. Acompañado por su esposa, Miriam Ochsorn, fue directamente a la parcela que Alcorcón «oferta» y que está limitada al norte con la M-501, al sur con la M-506 y la autovía A-5; al este con la M-40, y al oeste con la M-50. El promotor comprobó in situ las «bazas» del terreno alcorconero: amplitud, planitud y buenas conexiones, ya que él mismo pudo contar los 25 minutos que lo separan del aeropuerto, donde tenía aparcado su jet privado.

En la «tourné» madrileña, el matrimonio Adelson estuvo acompañado por el consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Percival Manglano; el consejero de Transportes, Pablo Cavero; el alcalde de Alcorcón, David Pérez, y el presidente de Promomadrid, Jesús Sáinz.

La visita se realizó en furgonetas volkswagen caravelle y fue calificada de «muy positiva» por algunos de los presentes en el encuetro. Fue corta, pero intensa. Tras descartar acudir a Valdecarros (la otra opción ofertada), el inversor norteamericano volvió a Barajas, donde mantuvo, en las salas de reuniones VIP del aeropuerto, una reunión con empresarios. A este encuentro, organizado –en un gesto de «fair play» por Promomadrid– acudieron, de la mano del secretario de Estado de Comercio, los consejeros de la Comunidad, Manglano y Cavero, y altos directivos madrileños y catalanes, entre los que estuvo el empresario Juan Miguel Villar Mir. También en Barajas, Adelson se reunió con la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y el vicealcalde y mano derecha, Miguel Ángel Villanueva, ya que Valdecarros (Vallecas) es el otro terreno en el que la compañía norteamericana baraja construir Eurovegas. Ya pasadas las ocho de la tarde, Botella y Villanueva despedían a Adelson, que puso rumbo Las Vegas.

En la carrera, desde 2007
Desde el año 2007, la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, «trabaja» para atraer al inversor a Madrid. A finales de 2008 la compañía tuvo que dar un paso para atrás tras engrosar la lista de víctimas que dejó a su paso la caída de Lehman Brothers. Tras pasar un tiempo al borde de la quiebra, Adelson logró resucitarla con una inyección de dinero que el magnate ya ha recuperado con creces: sus ingresos en 2011 alcanzaron los 9.410 millones de dólares. Cuando había vuelto a retomar su interés por España, José Luis Rodríguez-Zapatero anunció un adelanto electoral. Las negociaciones se paralizaron y Adelson esperó a que se formara el nuevo Gobierno. No en vano, el multimillonario aspira a conseguir ofertas fiscales y permisos para salas de fumadores en los casinos, como ya sucede en Nevada. Además, en estos últimos meses, el Gobierno ha ejercido de mediador entre el propietario de Las Vegas Sands y los empresarios madrileños y catalanes para formentar la contratación española.

De Madrid, Adelson se ha interesado por las medidas liberales, su renta per cápita (superior a todos los países europeos, excepto Luxemburgo e Irlanda), la red de transportes (Metro y conexiones de Barajas) y la implantación del bilingüismo en la escuela.

El detalle
«TOURNÉ» A PIE Y EN FURGONETA
Nada más aterrizar en Barajas, Adelson y su esposa, Miriam Ochsorn, pusieron rumbo a Alcorcón. Tras recorrer en coche el Ensanche Norte del municipio, dieron una pequeña vuelta a pie por una pequeña parte de los terrenos. Durante la visita, el matrimonio Adelson reiteró que el enclave «les gusta muchísimo». Se mostraron especialmente satisfechos por que el terreno esté perfectamente comunicado por carretera, por su cercanía tanto a Madrid como al núcleo sur de la región, así como por el hecho de que no haya grandes edificaciones en las inmediaciones del Ensanche. El alcalde David Pérez y el consejero Percival Manglano, con un libro sobre Alcorcón, ejercieron de anfitriones en un «tour» que quién sabe si habrá decantado la balanza sobre el futuro de Eurovegas.

Parada relámpago en uno de sus dos boeings 747
El Boeing B-747 SP en el que Adelson llegó ayer por la tarde a Madrid procedente de Israel es uno de los dos de esta clase que Las Vegas Sands tiene en propiedad. En los 70 se construyeron 45 unidades. Concebidos en su origen como aviones comerciales para Iran Air y Pan Am, con el fin de hacer el trayecto entre Oriente Medio y Nueva York sin escalas, los pocos que siguen operativos están en manos de gobiernos como los de Yemen y Qatar. El que aterrizó ayer en Madrid realizó su primer vuelo en 1979 y en el 85 fue comprado por Emiratos Árabes Unidos. En 2007, lo compró Las Vegas Sands.