Villena

El agua del trasvase del Júcar atraviesa los dos túneles

Los usuarios se reúnen esta semana con el Ministerio de Medio Ambiente para cerrar un acuerdo.

El agua ya corre por el trasvase Júcar-Vinalopó
El agua ya corre por el trasvase Júcar-Vinalopólarazon

Valencia- La sociedad estatal AcuaJúcar ha probado con éxito los túneles de Corbera y Barxeta, del tramo B del trasvase Júcar-Vinalopó, cuya puesta en marcha era imprescindible para que el agua del curso bajo del río Júcar pueda llegar a la Balsa de San Diego, en Villena, en la comarca alicantina del Alto Vinalopó.
A lo largo de esta semana, AcuaJúcar, empresa pública dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, ha realizado una serie de pruebas en los dos únicos túneles de la conducción Júcar-Vinalopó, lo que ha permitido por vez primera que el agua del curso bajo del río Júcar superase los accidentes geográficos de las sierras de Corbera y Barxeta.
Para conseguir este objetivo, las aguas se han impulsado desde la estación de bombeo de Panser, llegando a la Balsa de Llanera de Ranes, lo que en la práctica supone que el agua del Júcar ya puede llegar al Vinalopó.
Las pruebas llevadas a cabo en los dos túneles del trasvase han permitido bombear, desde la Balsa de Panser en Llaurí hasta la Balsa de Llanera de Ranes, cerca de 37.000 metros cúbicos de recursos superficiales del río Júcar captados en el punto de toma de la Conducción del Azud de la Marquesa en Cullera.
El siguiente paso ahora será la puesta en carga de la Balsa de San Diego, con 20 hectómetros de capacidad.
Sin usuarios
Sin embargo, el trasvase sigue sin contar con el apoyo de los usuarios potenciales. El próximo viernes el secretario de Estado de Agua, Josep Puxeu, tiene prevista una reunión con la Junta Central de Usuarios del Vinalopó para intentar aclarar este asunto. Los regantes del sur de Alicante exigen que el agua que reciban tenga la suficiente calidad como para que puedan regar, condición que consideran que no se cumple desde que el Gobierno decidió, durante la pasada legislatura, retrasar el punto de toma casi a la desembocadura del río, en el azud de la Marquesa.
 La puesta en marcha de este proyecto, financiado por el Gobierno de España y la Comisión Europea, permitirá resolver uno de los mayores problemas medioambientales de la Comunitat Valenciana, la sobre-explotación de los acuíferos subterráneos del Vinalopó.
Para ello será necesario ahora que el agua procedente del curso bajo del río Júcar pueda distribuirse desde la Balsa de San Diego en Villena por las comarcas alicantinas del Alto, Medio y Bajo Vinalopó a través del post-trasvase, cuya ejecución depende de la Generalitat Valenciana.