Caso Bretón

Las dos horas en blanco de Puerta

Llegó de marcha y a las seis de la tarde. Solo, y con pinta de haber consumido una gran cantidad de estupefacientes en las últimas horas, o quizá, días. Subió al apartamento y llamó a la puerta. Comenzaban las últimas cinco horas de su vida

Las incógnitas rodean las últimas horas de la vida de Antonio Puerta que pasó en el apartamento de General Varela
Las incógnitas rodean las últimas horas de la vida de Antonio Puerta que pasó en el apartamento de General Varelalarazon

Allí le esperaban una mujer y un hombre. El piso es pequeño así que se entiende que pasó la tarde acompañado por esta pareja. Al menos, es lo que se desprende de las diligencias policiales.

Que la muerte del agresor de Jesús Neira no fue violenta está fuera de toda duda. No presentaba signos de violencia y tenía una salud frágil y un currículum bastante abultado de adicción a las drogas. La autopsia preliminar confirma la sobredosis y nada hace pensar que pasase nada extraño esa tarde en la calle General Varela. De hecho, la investigación está cerrada.

Sin embargo, que no haya dudas acerca de la forma en la que murió no significa que la sucesión de los hechos fuese exactamente como explicaron los testigos a la Policía y al propio juez.

Que dos personas de dudosas costumbres queden con Antonio Puerta cuando él no se encuentra en el mejor de sus estados, da una idea de para qué se citan con él. Por eso, cuando el que se hiciera famoso tras su encontronazo con Neira, fallece, puede que tomasen su tiempo en recomponerse y «limpiar» en la forma más literal del término y menos maléfica la escena del suceso.

Tanto es así, que ellos aseguran que se dieron cuenta de que Puerta dormía porque le oyeron roncar. Así que, mantienen, no le dieron mayor importancia. Si, pongamos, acababa de drogarse, parece lo más razonable ya que había cocaína en el baño, ¿cómo es posible que alguien caiga rendido? Muchos cocainómanos recurren a sedantes para poder contrarrestar los efectos de la droga y conseguir conciliar el sueño. Puerta, no obstante, se duerme en el mismo suelo del baño. De una manera tan profunda, que hasta ronca.

Ahí comienzan las horas en blanco de Antonio. Supuestamente duerme, eso cuentan los testigos a la Policía. A la Prensa, en cambio, una de las mujeres que le llegó a ver muerto, Amanda, asegura que su amiga le llamó y muy asustada le dijo que Antonio se le había caído en el baño. Esa llamada fue fruto del miedo. Los acompañantes del agresor de Neira se quedaron bloqueados. Cuando ella llegó al apartamento, el cuerpo de Puerta ya estaba frío. ¿Cuándo entonces había muerto? ¿Dormía o se cayó? ¿Se asustaron los testigos y decidieron cuadrar la historia para la Policía?


Enterrado, no incinerado
- Desde primera hora de la mañana del miércoles, la familia ya había expresado a los responsables, incluso antes de saber a qué tanatorio iría, que deseaban incinerar a Antonio Puerta en La Almudena.
- El juez, de hecho, autorizó la cremación del cadáver tras tener acceso a la autopsia preliminar que confirmaba, junto con la cuchara, la jeringa y la cocaína encontrados en el lugar, la sobredosis como causa de la muerte.
- Sin embargo, y según testigos presenciales, la familia optó por enterrar el cuerpo de Antonio, en lugar de la incineración.
- De este modo sería posible realizarle nuevos análisis si finalmente la autopsia añadiera cualquier detalle del caso.
- No se sabe si ha sido prudencia u otra cosa lo que ha llevado a la familia a curarse en salud, en lugar de optar, como tenía pensado desde el primer momento, por la cremación.