Hibramer (Nueva Rumasa) adeuda 100 millones y estudia un ERE

La empresa Hibramer de Valladolid, del grupo Nueva Rumasa, acumula una deuda cercana a los cien millones de euros y sus administradores concursales han planteado un expediente de regulación de empleo (ERE) para despedir a 70 de los alrededor de 110 empleados de esta compañía de piensos, huevos y derivados.

Así se lo han trasladado esta tarde responsables del comité de empresa, de UGT, a los trabajadores, durante una asamblea celebrada en Valladolid.Un portavoz del comité, Miguel Ángel Montalvillo, ha explicado durante la asamblea que los administradores concursales nombrados por el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Valladolid condicionan la viabilidad de la empresa, declarada insolvente, a la aplicación de ese expediente de extinción de 70 contratos.

Por su parte, el comité propone que en todo caso el expediente sea solo de suspensión temporal de empleo, pero no de extinción.Montalvillo ha indicado que los administradores concursales "tienen que investigar"a qué se debe exactamente esa deuda de cien millones de euros, pero su planteamiento es de "cerrar ciertos centros"de trabajo y "dejar el resto al mínimo".

Hibramer tiene una fábrica de piensos a las afueras de Valladolid, que está parada debido la situación de insolvencia para pagar a los proveedores, y una granja avícola en la localidad vallisoletana de Aldeamayor de San Martín, que sigue en funcionamiento.Asimismo, el portavoz sindical ha expresado sus dudas sobre que si se producen despidos, los trabajadores afectados sean readmitidos en caso de que otra empresa adquiera las instalaciones de Hibramer.

Al parecer, existe una empresa interesada en "alquilar"el negocio de los derivados del huevo, conocidos como ovoproductos, pero "las gallinas no son rentables"a juicio de los administradores, ha señalado Miguel Ángel Montalvillo.La granja de Aldeamayor de San Martín cuenta con alrededor de 600.000 gallinas repartidas en varias naves.

Una inversión de cuatro millones de euros
Los administradores, ha explicado también el portavoz sindical, consideran que es más viable comprar el huevo para transformarlo y que reformar las instalaciones requeriría una inversión cercana a los cuatro millones de euros. A partir de hoy se abre un periodo de consultas durante quince días, tras el cual, si no se produce un acuerdo entre la parte sindical y los administradores concursales, será un juez el encargado de decidir sobre el futuro de la empresa.

Debido a que Hibramer carece de liquidez, será el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA) el que se haga cargo de los salarios que se adeudan a los trabajadores, correspondientes a febrero, marzo y abril, aunque el pago puede tardar hasta cien días desde el momento en que los empleados presenten toda la documentación.