Alcance del «gran» acuerdo social: reforma de pensiones y poco más

El primer acuerdo de este tipo se firmó en 1996 y el último hace cinco años. En esta ocasión le sevirá al Gobierno para lanzar un mensaje de unión contra la crisis a los mercados y al exterior un día antes de la visita de la canciller alemana, Angela Merkel a España.

El documento rubricado ayer por las cúpulas de gobierno de UGT, CC OO, CEOE y Cepyme y cuyo título reza, «para el crecimiento, el empleo y la garantía de pensiones», reconoce que la economía española atraviesa por una situación «muy delicada», como demuestra el alto número de parados. Con estas bases el Gobierno oficializará hoy el acuerdo, un pacto que mereció el elogio ayer del vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba y del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, quienes alabaron la «dosis de inteligencia» mostrada por patronal y sindicatos, mientras que la ministra de Economía, Elena Salgado, calificó de «buenísima noticia». En el documento se hace además un guiño a los funcionarios, un colectivo que sufrió el pasado mayo con el plan de ajuste presupuestario un recorte medio del 5%. En él se recoge el compromiso del Gobiero de recuperar le mesa de función pública y desarrollar el Estatuto de la Función Pública. En pensiones el documento afina un poco más y añade que los trabajadores despedidos podrán aplicarse periodos de cómputo más amplios de los 25 años para evitar perjuicios por la reducción de sus bases de cotización al final de su vida laboral. Puntualiza que la jubilación por ley se sitúa en «un intervalo» entre los 63 y los 67 años, vinculando la jubilación a los 65 años a carreras de cotización de 38,5 años y la de los 67 a carreras de 37. En resumidas cuentas el pacto alcanzado ayer se centra en la reforma de pensiones y en políticas de empleo y poco más. Del resto presenta un calendario genérico de actuaciones en materia energética y destaca la importancia de la innovación en la creación de empleo.